las tareas
Laura Franco se la pasa por estos días mirando por el microscopio algunas semillas, las más de ellas sin corteza, que encuentra en las heces de los pájaros deUrabá.
Esas aves, ella las captura con redes que tiende en medio del bosque de Tulenapa, que en lengua tule, la que hablan comunidades indígenas de Necoclí, quiere decir tierra de los conocedores delCosmos.
Para ir a ese bosque, Laura no tiene que caminar largas jornadas: está a unos pasos del laboratorio, es decir, hace parte de la sede de su centro de aprendizaje: la nueva sede de la Universidadde Antioquia en Carepa.
"Adelanto una investigación para entender la importancia de las aves en la diseminación de semillas y, por consiguiente, de las plantas", indica. Es su tesis de grado paraobtener el título de bióloga.
Ella es una de las pocas personas que se benefician de este rincón privilegiado para el estudio. Cifra que no pasa de 50. Pero a partir del segundo semestre de este año,según el rector, Alberto Uribe Correa, unos 400 estudiantes ingresarán allí.
Era un terreno que había sido del ICA, entidad que lo utilizó mucho tiempo para sus experimentos, pero que en los últimos añoshabía abandonado. Más de 3.000 millones de pesos —recursos de la U y del Departamento— se invirtieron en este espacio que albergará alumnos de Ingeniería y Tecnología Agrícola.
Serán 400 estudiantese investigadores que harán compañía a las aves que estudia Laura y a los monos aulladores en una convivencia armónica.
Y no hallaron el tal planeta x
Ni pequeño, menos grande.Tampoco oculto detrás de otro cuerpo. El planeta X no apareció.Aunque ese no fue el objetivo de su misión, la información del satélite Wise de la Nasa no permite inferir siquiera su presencia.Planeta Xlo llamaron algunos astrónomos; Némesis o Tycho otros que hablaban no de planeta sino de una estrella hermana del Sol con el que conformaba un sistema binario. Otros lo asociaron a Nibiru, ese...
Regístrate para leer el documento completo.