I 01 Virtudes H Bitos
I. VIRTUDES: Introducción.
"La virtud es una disposición habitual y firme a hacer el bien. Permite a la
persona no sólo realizar actos buenos, sino dar lo mejor de si misma. Con
todas sus fuerzas sensibles y espirituales, la persona virtuosa tiende hacia
el bien, lo busca y lo elige a través de acciones concretas" (Cat. 1803).
Significa la palabra virtud, en sentido general, algunacualidad buena del
hombre y connota por su etimología latina, virtus (de vir, varón , y vis,
fuerza), la idea de fuerza y vigor, y según la griega, areté, expresa la idea de
perfección, mérito o cualidad que hacen al hombre digno de gloria. Los
griegos, al parecer, fueron los primeros en estudiar filosóficamente las
virtudes, alcanzando su desarrollo con Aristóteles, que liga la virtud al
conceptode habito. Los autores cristianos, especialmente San Agustín y
luego la escolástica, profundizaron en el tema, destacando el estudio de
Santo Tomas, que de nuevo enlaza el concepto de virtud al de habito,
haciendo preceder en la "Suma" el tratado de hábitos al de virtudes. En la
teología posterior se fue progresivamente reduciendo de extensión el tratado
de hábitos. Por otro lado, se ira tambiéndesvirtuando la noción de habito al
estudiarlo sólo desde un punto de vista Psicológico, como algo ligado
fundamentalmente con el aprendizaje, como modificación de la conducta
persistente en el tiempo producida por repetición de actos, pero sin tener en
cuenta su inhesión en el ser y en el sujeto y descuidando los aspectos éticos.
II . HÁBITOS.
2.1. Naturaleza.
Para que el hombre alcance el finque le corresponde como criatura
racional, no le bastan las perfecciones recibidas con su naturaleza, sino que
debe disponerse libremente -a diferencia de los irracionales- para la
consecución de aquel fin.
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Sin embargo, no cualquier disposición se ha de calificar, sin más, de
hábito, sino únicamente aquella que ha alcanzado en el sujeto una firme
estabilidad; de aquí que las obras virtuosas,fruto de hábitos operativos
buenos, tengan estas notas distintivas: naturalidad y estabilidad de las
acciones del hombre virtuoso; prontitud y perfección al realizar las obras
buenas que ejecuta, y, finalmente, suavidad y agrado -compatibles con el
esfuerzo de la criatura- al poner en practica esas acciones.
2.2. Especificación.
Siendo los hábitos disposiciones estables y fuertes de la criatura,reciben
su primera especificación según que acerquen o alejen del fin; es decir,
según que dispongan bien o mal para el logro de los fines particulares de
cada potencia, subordinados al fin último de la persona; y de aquí surge la
calificación de los hábitos en buenos.
2.3. Los hábitos y la libertad.
Los hábitos connaturalizan a la libertad del hombre respecto al fin propio
al que inclinan; de talmodo que permaneciendo siempre la defectibilidad de
la libertad en su orientación al bien, cabe un continuo incremento y arraigo
en el recto uso de la libertad, por el afianzamiento en el sujeto de los hábitos
bueno: o, en sentido contrario, cabe una progresiva debilitación de su
libertad para el fin que, de suyo, le es propio: el bien.
Todo ello se debe a que los hábitos -buenos o malos- implicanque la
libertad, en todo momento, pueda ejercitarse para bien o para mal, pues
"usar del hábito no es algo necesario sino que depende de la voluntad del
sujeto". Pero, a la vez, los hábitos influencian al sujeto en el ejercicio de su
libertad, connaturalizándole respecto a aquellos fines particulares -buenos o
malos- a los que disponen los diversos hábitos: el hombre, sin perder su
libertad se vahaciendo más justo, más prudente, etc., o, por el contrario y
siempre en el ámbito de su libertad, se va alejando del fin al que esta
llamado, porque imperan en el los hábitos viciosos.
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2.4. Origen y crecimiento de los hábitos.
a) En la esfera natural.
Existen, unas disposiciones o tendencias, constitutivas de la
naturaleza humana, que hacen posible el germinar de los hábitos buenos en
la...
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