Ética según savater

Ética. Fernando Savater. Principales ideas.

Los seres humanos, tanto individual como colectivamente, constantemente optan entre diferentes formas de actuar, las que justifican ante sí y ante los demás: justificaciones que remiten en último término a un puñado de objetivos volitivos, a preferencias globales supremas que ya no pueden ser ulteriormente justificadas y que se afirman [según ellos]por su propia evidencia.

Constantemente estamos eligiendo una forma de actuar frente a otras posibles, y constantemente legitimamos racionalmente nuestra actuación, sean hazañas o fechorías, invocando valores "evidentes".

¿Pueden señalarse áreas preferenciales realmente supremas, más allá las cuales sea por completo ocioso buscar legitimidad alguna, las cuales a su vez legitimen en cascadalos diversos valores que agrupan? Si las hay, deberán responder a la condición humana misma, es decir, a lo que somos. En una palabra: la explicación última de lo que queremos proviene de aquello que somos sin querer. ¿Y qué somos? Seres naturales, sin duda, pero seres sociales también. Esta condición dual nos da la clave de las dos grandes áreas que abarcan la nómina completa de nuestraspreferencias ideales. Savater las denomina áreas de la vida y área de la libertad.

El área de la vida recoge las apetencias de salud, progenie, satisfacciones sensuales... El área de la libertad congrega valores de excelencia y riesgo, el atrevimiento de la novedad, el reto a lo desconocido... Es evidente que los valores pertenecientes a una y a otra de las áreas se intersectan, se impregnan y serefuerzan con frecuencia mutuamente. Pero también resulta obvio que en ocasiones, demasiado numerosas, se oponen frontalmente. Todas las sabidurías axiológicas, por su parte, han intentado conciliar y equilibrar estas demandas dispares.

Los valores de la vida y de la libertad sustentan cuántas éticas y políticas fueron, son y serán.

Hablando con exactitud no hay éticas y políticas renunciativas,pues sólo se sacrifican unos valores para aumentar otros, ya sea del área opuesta o de la misma área.

Ética y política no son sino estrategias para autoafirmar nuestra vida en cuanto humana, es decir, comunitaria y libre. Desde luego que a veces el sujeto acepta alguna limitación inmediata, pero en ningún momento deja de buscar el interés que le parece más alto. A partir de la ilustración elamor propio se situó como una auténtica base de los valores humanos más estimables: puede hablarse de la actitud moral como un egoísmo bien entendido; que se diferencia de la moralina, que representa una visión penitencial de la moralidad porque considera exclusivamente valioso no lo que hacemos "por los demás" sino lo que hacemos contra nosotros mismos, es decir, lo que nos desmiente y contraría. Elegoísmo, que es el interés por la propia plenitud vital y que es índice de cordura, suele confundirse con el egotismo, que es la creencia alucinada en que nada es real salvo nuestro propio ego, síntoma ominoso de las peores locuras individuales y colectivas.

Savater dice que nadie descubre por sí solo la existencia de los valores de la vida y de la libertad. Primeramente, el grupo humano alque pertenecemos nos los impone o propone; posteriormente, nos vemos obligados a reflexionar sobre sus valores hasta ir dotando a nuestra conducta de perfiles axiológicos idiosincráticos: los valores socialmente aprobados están codificados en diversos tipos de normas o leyes, las que explicitan de forma públicamente imperativa a la conducta requerida, así como a la descartada. Las colectividadessuelen inculcar tales comportamientos socialmente valiosos por medio de coacciones, que pueden ir desde la simple desaprobación social hasta los más drásticos castigos. Savater critica, calificándolos de espíritus superficiales, a quienes consideran los valores como simple efecto domesticador de la presión colectiva: les dice que deberían preguntarse cómo hubiera podido existir sociedad humana...