15m Israel

La ola de indignación que sacude Israel se manifestó a la española, acampando durante días en las ciudades más importantes, se tradujo en la salida multitudinaria de jóvenes a las calles de Jerusalén, Tel Aviv, Beersheva o Kfar Saba. Sus reivindicaciones: acceso a una vivienda digna, la bajada de precios en bienes de consumo básico. El 14 de julio se produjeron las primeras acampadas en elcorazón de Tel Aviv, en el bulevar Rothschild, perteneciente a una de las dinastías de banqueros más adinerados e influyentes del mundo. La acampada fue convocada a través de las redes sociales, las cuales jugaron aquí, como en casi todas las revueltas recientes, un papel importante de segregación y unión de los indignados.
Estas frases; “La democracia sale a la calle” y “El Gobierno contra elpueblo-El pueblo contra el Gobierno” que nos pueden recordar al 15M español, son los lemas bajo los que se reunieron más de 30.000 personas en una gran marcha celebrada en Tel Aviv, por israelíes de toda edad y condición, que llevaban días acampando en no menos de 20 ciudades, del sur, del norte, de la costa y del desierto, de mayoría judía o árabe
El 23 de Julio de 2011 hubo más acampadas en lasprincipales ciudades de Israel, 150.000 personas se lanzaron a la calle, a lo largo de 17 días se había convertido en una corriente popular que contagió a todos los israelíes, se mezclaron movimientos sionistas con pacifistas, ecologistas, activistas gays, comunistas y hasta ultraortodoxos del barrio de Bnei Brak, residencia de muchas de las máximas autoridades contemporáneas de la Torá.
Como todo, lasprotestas se iniciaron a raíz de una chispa que las encendió, en este caso, fue el incremento del precio del “requesón” en un 70%. Hemos de tener en cuenta que este es un producto básico en la cocina israelí. En su momento este fue el germen de las protestas, hoy este hecho es una mera anécdota en un movimiento que exige reformas profundas en el sistema financiero de Israel. Por otra parte elpan y la gasolina subieron en un 7%, incremento preocupante para el bolsillo del ciudadano medio.
Para entender mejor esto, los salarios han subido en siete años un 1%, mientras los alquileres lo han hecho un 250%. El mercado está al alza por la demanda de judíos adinerados que quieren un lugar donde pasar unas semanas al año y por la especulación de millonarios de todo el mundo, sobre todo en TelAviv, que se ha convertido en la ciudad más cara de Oriente Medio en los últimos tres años.
En el Gobierno, las consecuencias se empezaron a hacer palpables cuando bajó la popularidad del primer ministro, Benjamin Netanyahu, del 51% al 32%. Inmediatamente, en un intento a la desesperada por bajar los humos en las calles, anuncia 10.000 viviendas para jóvenes, echando tabiques en edificiosoficiales que hoy son oficinas, o rebajas en impuestos indirectos, o ayudas para jóvenes que se trasladen a ciudades poco pobladas. Anunció incluso la creación de un equipo ministerial especial para aportar soluciones, admitiendo así la existencia de un verdadero problema. No fue suficiente para los indignados, dado que el lunes siguiente arrancaron una convocatoria de huelga en una treintena demunicipios, cerrando oficinas municipales y negándose a limpiar las calles y recoger la basura. Huelga también, en la administración.
Seguidamente dimite el director general de Finanzas, el hombre que cifró en 12.000 millones de euros el coste de dar respuesta a las reivindicaciones ciudadanas.
Ahora pasemos a las micro cifras, Israel soportaba mejor que otros países la crisis: apenas con un 5,8% deparo, 186.000 personas, según datos oficiales de abril del 2011, en el inicio de las revueltas, la economía crecía a un ritmo del 6% anual, es la segunda potencia tras EEUU y es la nación que mayor porcentaje del PIB invierte en I+D+i (1,3 puntos más que Japón y 1,8 más que EEUU).
Sin embargo, a pesar de lo que digan las micro cifras, lo que realmente nota el ciudadano medio es el precio de...