Abelardo Y Eloísa
En ese tiempo no faltaronmaestros de dudosa sabiduría que aprovechando la ignorancia general y el deseo de aprender, iban de lugar en lugar enseñando y dando clases poco sustanciosas o aderezadas con sus propias ideas, no muy brillantes, exigiendo a cambio elevadas recompensas y muchas distinciones. Por su lado Abelardo, tuvo siempre en su contra su infinito amor por el conocimiento verdadero y su natural desenfado en decirverdades que incomodaban a muchos.
Mediante su natural inteligencia y la abundante ciencia adquirida, Abelardo fue chocando contra los maestros de su tiempo a los que descubría y denunciaba como charlatanes ignorantes que solamente se enriquecían a costa de la mayor ignorancia de los demás. Pronto Abelardo estuvo rodeado de gente predispuesta en su contra y lo peor es que é jamás se dio cuenta dela mala voluntad que levantaba. Y es que una falta grave en el carácter de Abelardo fue siempre su desmedido orgullo y su vanidad intelectual que le granjeaba muchos enemigos.
Era costumbre de la época que los maestros viajaran impartiendo su cátedra; incluso la libertad de enseñar donde gustara era un derecho rigurosamente ganado y ejercido. Abelardo pasó del norte de Francia hacia París dondeconoció a Fulberto, un canónigo de NotreDame que estaba interesado en que su bellísima sobrina Eloísa tuviera una sólida formación teológica. Abelardo se entrego gustoso a la tarea de formarla y aquí se dio una de las más extrañas pasiones que registra la historia del amor humano.
Eloísa quedó enamorada de Abelardo, pero más que de su presencia aunque no era mal parecido, gustó de su talento. Porotra parte, la propia Eloísa parecía recrearse en seducir al intelectual y ella misma buscaba hacer de sus relaciones algo tan pecaminosas como prohibidas, encontrando el encanto de su pasión en que estaban haciendo algo que no debería haber sido. Cuando se entrego por primera vez Eloísa a Abelardo, busco excitarlo con su progresiva desnudes y luego, ya en el lecho, procuro enfatizar mucho lapérdida de su virginidad. No tardo ella en quedar embarazada y dio a luz a un hijo, lo llamaron Astrolabio en honor al más interesante aparato de precisión inventado en aquel entonces.
Desde luego que el tío de Eloísa, el canónigo Fulberto esta enfurecido. Pero admiraba el talento de de Abelardo y le propuso tan solo que se casaran y así sus faltas quedarían compensadas. El paroxismo de Eloísaimpidió este acuerdo. Era la época en que los papas como Gregorio VII buscaban restaurar el natural respeto del clero y el mismo pueblo los apoyaba: muchos clérigos eran casados y se les persiguió por ello, sus esposas fueron casadas como meretrices. Abelardo poseía ordenes menores y su vida eclesiástica estaba por terminar si se casaba. Eloísa sopeso esta posibilidad y se negó al matrimonio ya que lacarrera de Abelardo se vería menguada y lo que ella mas admiraba en él su talento, no alcanzaría mayor relieve. Por otra parte, empeñada siempre en que sus amores prohibidos. Eloísa insistía en que volverse esposa de Abelardo sería tanto como negarse a amar. En una carta de aquel entonces, Eloísa dice a Abelardo “sabe que prefiero mejor ser para ti, que ser tuya”
Finalmente se casaron...
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