Acceso a la palabra de dios

ACCESO A LA PALABRA DE DIOS:
"EL PAN Y EL VINO DE NUESTRA MESA DIARIA”
"En los Libros Sagrados, el Padre, que está en el cielo, sale amorosamente al encuentro de sus hijos para conversar con ellos. Y es tan grande el poder y la fuerza de la Palabra de Dios, que constituye sustento y vigor de la Iglesia, firmeza de fe para sus hijos, alimento del alma, fuente límpida y perenne de vidaespiritual.” (DV 21). “Así Dios, que habló en otros tiempos, sigue conversando siempre con la Esposa de su Hijo amado” (DV 8).
Con estas palabras se transparenta que la Sagrada Escritura –la gran “carta que el Padre-Madre Dios envía a sus hijos que peregrinan en el mundo-, está llamada a ser la levadura que ilumina y fermenta nuestro diario caminar. Porque la Palabra es más…
• que uno de esos'códigos' que se dejan junto a esos libros legales y se 'almacenan' en nuestras bibliotecas cogiendo más polvo y polilla cada día;
• que ese libro misterioso al cual sólo los 'sabios y entendidos' pueden acceder;
• que esa 'joya' personal o familiar –comunitaria-, que con filos de oro se muestra en la vitrina de nuestras casas cual figura de Lladró.
La Palabra se nos ofrece como alimento y bebidadel diario peregrinar, porque la Palabra no es sólo comunicación de ideas sino sobre todo es alimento y bebida para caminar, memoria de los sufrimientos y la esperanza de un pueblo, apertura de nuevas posibilidades de existencia humana, consuelo, aliento de utopía...
Así este libro de la Vida viene a ser como ese pan y ese vino familiar que se pone en el centro de la mesa común para ser 'el pan yel vino nuestro de cada día'.
Desde esta intuición, con sencillez y brevedad, presento unas pistas para que este 'pan y este vino de nuestra mesa' sean ese alimento crujiente y esa bebida consoladora que nutre la vida con la presencia de Dios y la impulsa a amar.

 Pan que debe ser deseado y esperado
Como quien por la mañana desea encontrarse con el pan crujiente en la mesa, la Palabra deDios antes que buscarla pide ser deseada-esperada en lo hondo del alma. Es eso mismo que el profeta Ezequiel había dicho de parte del Señor a su pueblo: "hijo de hombre, mira con tus ojos, escucha con tus oídos y pon tu corazón en todo lo que voy a mostrarte" (Ez 40,2), porque el Señor sigue "emitiendo señales de vida y nunca está fuera de cobertura", porque con su palabra sigue entretejiendonuestra historia junto con Él.
Por lo tanto, para que la Palabra de Dios sea deseada y esperada, el gran imperativo de Dios a su pueblo y a cada uno de nosotros es ¡ESCUCHA! (Cf. Dt, 4-9). De esta manera, acudir a la Sagrada Escritura no es cuestión de búsqueda de recursos e información, sino ante todo espera ardiente del Dios que sigue caminando con nosotros y sigue llenando de señales nuestrapequeña vida que quiere ser abrazada por el Amor: "Aguardo al Señor, lo aguarda mi alma, esperando en su palabra; mi alma a mi dueño, más que el centinela a la aurora" (Sal 130, 5-6). Así, la Sagrada Escritura, es ese pan que el Padre Bueno da a sus hijos; es la gran carta de amor de nuestro Padre Dios para nuestro peregrinar como personas, como familias y como pueblo.

 Pan de nuestra mismahistoria
Podríamos decir que la Palabra de Dios es también como ese pan que nos recuerda –signo y memoria- nuestra misma historia. Así, la Sagrada Escritura, nos hace volver a una mirada connatural con lo que vivimos, anhelamos, caminamos, buscamos, sufrimos, gustamos, esperamos...
J. L. Sicre llama a este acceso el de la "connaturalidad". Es ese modo tan propio y familiar que le es dado, como don, anuestra gente sencilla y humilde: "Yo te bendigo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has ocultado estas cosas a sabios e inteligentes, y se las has revelado a pequeños. Sí, Padre, pues así te ha parecido bien" (Mt 11, 25-26).
Como dice C. Mesters la Sagrada Escritura no es el primer libro que Dios escribió para nosotros, ni el más importante, ya que el primer libro es la naturaleza...