administardor de empresas

1 El campo de lo social viene respondiendo a fenómenos contemporáneos de violencia y maltrato intrafamiliar y socio cultural del niño con la implementación de leyes jurídicas. Ley que establece derechos del niño y sanciones y deberes para el adulto con quien se relaciona. Esto significa que la niñez pasa a tener un lugar en la estructuración formal de la ley que regula los vínculos sociales.Esto es importante, pero absolutamente insuficiente para responder a ese maltrato y desamparo de la niñez que se manifiesta en nuestros días.

2 Sabemos que toda ley jurídica se sustenta en un principio de generalización y universalización en el sentido de que “la ley es para todos” y lo que hace es operar una norma de conducta, vale decir, es la ley que dice lo que una cultura debe ser, unfuncionamiento normal y general de un vínculo. Al presentarse de esta forma, la dicha ley no puede ni tiene como considerar al sujeto, es decir, a la particularidad del ser en su relación con la ley formal. Con esto excluye algo fundamental a la condición humana del existir, la subjetividad, o como decimos los psicoanalistas, hay exclusión del sujeto del deseo en el puro formalismo de la ley. Esta es laparadoja de la respuesta puramente jurídica al malestar de la cultura. Es la paradoja de la ley que en nombre de los DD. HH. puede presentarse como inhumana o inútil en su propuesta. Por lo tanto, no basta la pura implementación o imposición institucional o familiar de dicha ley de amparo al menor. Se debe apuntar a la condición humanizante de la ley, ya que maltrato es eso que correspondefundamentalmente a la presencia de eso que podemos llamar deshumanidad. Cuanto más se trabaja por reglamentar las conductas tanto más se deshumanizan las relaciones. Las oenegés de DD. HH. corren el serio riesgo de ser portadores de esta tendencia a la deshumanización. Muchas oenegés combaten, rechazan, descalifican, ironizan el psicoanálisis no sabiendo que con ello es la ética particularizada másfundamental de la condición humana lo que van rechazando.

3 La familia es el lugar donde siempre se situó ese campo de humanización de la ley. Es en su campo de relaciones interpersonales donde la ley puede ser encarnada y subjetivada por seres vivos específicos y vinculados desde deseos particulares, fantasías y demandas singulares. Es en la estructura familiar donde la ley formal pierde su empujeal generalizar todo. Es allí donde la ley se particulariza y, por ese motivo, es capaz de subjetivar proponiendo un vínculo singular del sujeto con la ley. Allí, en la familia, es donde la ley puede tener chance de dejar de ser una ley de pura generalidad normativa.

4 La ley anónima es la ley social e institucional y corresponde al lugar de la ley jurídica. Para el psicoanálisis, en lo que ellapropone como horizonte de lo humano del ser, el maltrato es correlato a la ausencia de subjetividad, es decir, presencia de un ser desubjetivado y una ley anónima inoperante. En nuestro tiempo tomado por la tecnociencia y el capitalismo no son solo los niños los que se muestran vulnerables a este desamparo. El empuje contemporáneo es hacia la desujetivacion generalizada. Tenemos el deber ético deresponder a esta cuestión: ¿cómo recolocar esa función esencial subjetivante y humanizante de la familia es un más allá de una célula de producción y consumo y del anonimato del ser a que viene reduciéndose? La ley generalizada de nuestro tiempo es “¡consuma!”, no importa que sea un trabajador anónimo, una pieza del mecanismo de producción. Identificar al sujeto niño como consumidor, que sea estasu identidad, y dejarlo sin palabras y sin criterio y responsabilidad, es la violencia contemporánea (y que no se hable de los comités de ética porque estos siempre llegan tarde como para tranquilizar las conciencias).

5 Es por eso que el psicoanálisis debe incluirse en las instituciones públicas y en todos los sectores sociales para producir con su posición la aparición de la particularidad...