Administrativo

CAPITULO I

LAS PERSONAS JURÍDICAS DE DERECHO PÚBLICO, SU ESTRUCTURA Y FORMAS DE ORGANIZACIÓN.

“Comentario de introducción.

No ha manera de definición, digamos que el estado no es un ser que exista por si mismo y con voluntad propia, más bien es un fenómeno que se da en el seno de la sociedad, consiste en el hecho de que algunos, la mayoría o su totalidad (cuando menos idealmente),dictan o imponen el orden jurídico que regirá la manera de los hombres que se hallan unidos dentro de una determinada extensión territorial.

Dicha imposición sustentada en el poder supremo del estado, no es aceptada de manera mecánica, pues implica y exige crear y mantener entre los individuos un consenso favorable, así como sus correspondientes instituciones.

A este respecto, loscontractualistas (Hobbes y Rousseau, entre otros), sustentaban que el hombre ante los inconvenientes de su socialización, decide establecer un pacto con sus congéneres para así garantizar el bien de todos, a efecto de lo cual renuncian a una parte de su libertad.

Para Rousseau, es en el pueblo donde reside la verdadera soberanía, pues este, como emisor de una ‘voluntad general’, cambia su libertadnatural por su libertad civil, voluntad, por una parte, que deriva del contrato social, y en cuya virtud la misma puede ser impuesta al individuo, mediante la fuerza, cuando se niegue a acatarla.

Cabe señalar que para Rousseau, la ‘voluntad general’ constituye un acto puro del pensamiento, el cual razona al margen de las pasiones humanas y de los intereses individuales o de grupo, es lavoluntad general según la verdad, voluntad que no necesariamente está identificada con la opinión de la mayoría, sino con razón, siempre dirigida hacia el bien común.

Así el autor Ginebrino sentencia que, cuando el gobernante no observa los dictados de la voluntad general y actúa en contra del bienestar común, ha dejado de representar al pueblo que lo eligió (o que lo acepto); el modelo del estadoal que aspira Rousseau es aquel en el que el gobernante y gobernado son una misma cosa.

No obstante la gran influencia que Rousseau, ejerció en la concepción de la voluntad general como poder supremo del estado y que tal influencia haya sido plasmada en el artículo 39 de nuestra constitución, es de señalar que filósofos anteriores a este, ya habían sostenido teorías basadas precisamente enel contrato social, he incluso, tal vez a juicio del compilador, fueron expresadas aun con mayor claridad que la propuesta por Rousseau. Las aludidas opiniones las transcribo por orden cronológico y son las siguientes:

Tomás de Aquino, señala que: “En primer lugar, si por derecho toca al pueblo el elegir su propio rey, sin injusticia puede el mismo pueblo destituir al rey elegido o recortar supoder, si abusa tiránicamente del mismo. Y no ha de pensarse que es infiel la multitud que derroca a un tirano, aun cuando desde mucho tiempo atrás le hubiese estado sujeta; porque él mismo, al no cumplir su oficio fielmente como lo exige la obligación regia, ha merecido que la multitud no le sostenga el pacto por el cual ha sido hecho rey. Así sucedió en Roma con Tarquino el Soberbio, a quienhabían elegido rey, a quien echaron del reino por su tiranía y la de sus hijos, y en cambio pusieron para gobernar con menos poder a varios cónsules. Así también el senado romano mató a Domiciano, sucesor de Vespasiano su padre y de tito su hermano, quienes habían gobernado prudentemente; y todas sus maldades contra el pueblo romano fueron saludablemente revocadas. Por tal derogación, el discípuloamadísimo del Señor, Juan el Evangelista, fue devuelto a Efeso por decreto del senado, ya que había sido desterrado a la isla de Patmos.

Más si es derecho de algún superior el elegir rey para un pueblo, se debe esperar que él remedie la maldad de la tiranía. Así, Arquéalo, hijo de Herodes y sucesor de este en Judea, habiendo empezado a gobernar imitando la perversidad paterna, fue acusado...