Alfonso García

HISTORIA DE ALFONSO GARCÍA
“Un hombre en busca del éxito”
Alfonso es uno de esos hombres que “se ha hecho a sí mismo”. Estudió administración de empresas en una buena universidad y después de trabajar dos años, hizo un post grado que le exigió fuerte. Entró a trabajar en una transnacional y pronto empezó a escalar puestos y acumular responsabilidades.
Alfonso es esencialmente un hombre deacción. Su vida es el trabajo. Hace ocho años se caso con una compañera que conoció en la universidad; la vida, que da tantas vueltas, quiso que coincidieran en una negociación, defendiendo los intereses de empresas distintas. Marisa le ganó la partida por conocimientos y por habilidad. Alfonso, que siempre ha sido mal perdedor, no lo llevó bien y algo se disgustó con ella, pero luego comenzó afijarse en Marisa. No entendía cómo había podido ganarle esa partida. La verdad es que tuvo mala suerte, porque Marisa había hecho unos estudios de post grado, especializándose precisamente en ese tipo de negociaciones. De la admiración por su calidad profesional pasó al amor, Marisa le hizo esperar un poco, pero al fin hubo el sí y un año después se casaron. Alfonso nunca lo supo, pero desde susestudios en la universidad, Marisa se había fijado en él.
En los primeros seis años de matrimonio les fue bastante bien, menos en una cosa: Alfonso se ha casado con Marisa y con el trabajo. Llega a casa cuando los tres niños están ya acostados, no tiene tiempo ni ganas para jugar con ellos y cuando Marisa le pide que revise las tareas del mayor, no lo hace; Alfonso piensa que tiene que descansar y queun profesional de su nivel no va a estar en esas pequeñeces.
En la empresa ha llegado a ocupar una gerencia importante. Pero parece que lo preparan para más, porque lo están haciendo rotar por todos los departamentos. Efectivamente, tres años después, y al borde de sus cuarenta años, Alfonso es nombrado gerente general. No le asusta el reto y pronto se nota en la vida de la empresa su empuje, sucreatividad y su visión de futuro. Es el hombre omnipresente en todos los departamentos y sigue con detalle los proyectos. Ayuda a los que están en dificultades, pero exige fuerte ante las fallas. Sabe promocionar y levantar a los que tienen condiciones. Es un gerente general entusiasta, animoso, incluso con notas de buen humor, que se gana a la gente. Tan pronto se ve a Alfonso en la planta,como en la oficina de los dibujantes o supervisando el control de calidad. Donde se le ve poco es en su casa.
En el ámbito familiar las cosas se empiezan a deteriorar seriamente. Fácilmente se pone de mal humor en la casa, se queja, los chicos le incomodan porque hacen bulla y se le nota desganado. Marisa lo sabe llevar bien, cede, y les dice a los chicos: “estén quietos y no hagan bulla porque supapá está cansado”. A veces piensa que debe plantarse firme y exigirle que cumpla con sus obligaciones en la casa, con ella y con los chicos, y hacerle ver que su vida no es solo el trabajo. Pero teme su reacción. Nunca le ha dicho nada fuerte. Y además piensa: “yo no debo meterme en cosas de su trabajo”.
Pasan cuatro o cinco años más. Los chicos van siendo grandes, notan la distancia de su padre,y aunque desean conversar con él, no tienen confianza para acercarse. Él también lo nota y empieza a sentir que le gustaría ser amigo de sus hijos, recibir su cariño y sus confidencias, compartir aficiones y algún deporte con ellos, pero hay como un muro que lo impide. Algunas veces trata de acercarse, de mostrar interés, de mostrar interés por sus cosas, pero no le sale natural. Como quiereganárselos, comienza la táctica de comprarles cosas y darles todos los permisos que pidan. Marisa se molesta.
Surge un problema nuevo. Sucede que los fines de semana, cuando pasa de la tensión trepidante de los días de trabajo a no hacer nada, ha empezado a tomar. No se pasa mucho, pero Marisa se da cuenta de que inicia un camino peligroso y se lo hace ver. Alfonso se justifica:
“- Yo no puedo...