Ars nova y ars antiqua
En la Europa de los siglos XIV y XV surgieron dos estilos musicales que se denominaron ars antiqua y ars nova. La diferencia entre ambos fue el refinamiento métrico del segundo, que alcanzó más precisión rítmica en la escritura, pudiendo trazar de esa manera un entramado polifónico más complejo. Los géneros característicos del ars antiqua, relacionado con la escuela de Notre Dame, son el organum, el rondó, el conductus, el hoquetus y, en especial, el motete primitivo. En 1280 Franco de Colonia introdujo un nuevo tipo de grafía rítmica que subsistió hasta el siglo XVI, la notación mensurable. Un ejemplo español destacado son los Códices de Huelva. El ars nova nació en París y propone una innovación en la manera de componer los motetes, introduciendo técnicas cíclicas como la talea y el color. Los creadores más destacados de la época son Philippe de Vitry y Guillaume de Machaut, reconocido por su misa profana del Hombre Armado. Literalmente 'arte antiguo', es el término latino, equivalente a los de Ars Veterum o Ars Vetus, que se utiliza desde el siglo XIV para distinguir el estilo compositivo propio de la polifonía del siglo XIII, de las nuevas composiciones que comienzan a elaborarse a partir del siglo XIV en el entorno musical de las escuelas de París. El término Ars Antiqua surge por oposición con el de Ars Nova (nuevo arte). Ars Nova es, precisamente, el título de un tratado atribuido al músico Philippe de Vitry, en el que propone las que serán las bases del nuevo estilo compositivo así como los nuevos sistemas de notación musical que harán posible reflejar sobre el papel las novedades que los compositores adscritos a este nuevo estilo puedan introducir en sus obras, novedades que, a partir del siglo XIV, iban a consistir sobre todo en una creciente complejidad rítmica. Tanto en la expresión Ars Antiqua como en su opuesto Ars Nova, el término "ars" corresponde a la noción actual de técnica, y no es, por lo tanto, equivalente a nuestra consideración de arte. Por extensión, el término Ars Antiqua ha terminado aplicándose no sólo a las obras polifónicas compuestas en el siglo XIII, sino también a las procedentes de siglos anteriores, particularmente a las obras polifónicas tempranas elaboradas dentro del círculo musical de la escuela de Notre Dame, cuyos principales representantes fueron los maestros Léonin y Perotin. Así pues, cabría establecer dentro del Ars Antiqua una división entre la música francesa de la escuela de Notre Dame, compuesta entre los años 1160 y 1260, y la procedente del período que va desde el año 1260 hasta 1320. Así como Philippe de Vitry y Jehan des Murs están considerados como los principales representantes de los principios técnicos y estéticos del Ars Nova, el músico Jacques de Liège (nombre latinizado como Jacobo de Lieja) es el principal representante del estilo compositivo del Ars Antiqua, debido a las teorías recogidas en su tratado Speculum Musicae, el tratado musical más extenso que ha sobrevivido desde la Edad Media. Jacobo de Lieja, que nació en esta ciudad flamenca en el año 1323, se opuso en su obra a los nuevos métodos empleados por los músicos "modernos" en sus composiciones y defendió, sin embargo, los métodos y los modelos de las composiciones de los antiguos músicos medievales. Sus críticas contra los músicos adscritos al Ars Nova se basan en el hecho de que éstos se dedican solamente a cultivar algunos géneros polifónicos como el motete y la cantilena, mientras que ignoran otras formas de tradición como el organum y el conductus. Por otra parte, los compositores modernos, siempre bajo el punto de vista de Jacobo de Lieja, utilizaban para escribir sus obras una gran cantidad de formas imperfectas y confusas de notación, mientras que los antiguos ponían todo su empeño en reflejar con total exactitud las características de sus obras mediante un sistema de notación más estable y menos ...
Regístrate para leer el documento completo.