arte

Capitulo uno: viaje de una hora.
Los hombros me temblaban un poco, sentía el cuello y parte de la espalda tensa por el frio, sabía perfectamente que no era tan buena la idea de al salir de clases para a ver la galería de obras del museo de la ciudad, pero también tenía en mente que hace un par de semanas se colocaron nuevas piezas de un expositor francés, y me intrigaba mucho su trabajo lacritica había sido bastante favorable, a lo largo de las ciudades más grandes de varios países dejaba un sabor de boca muy bueno claramente dicho por la prensa, pero tenía que verlo por mis propios ojos, así que mi paso, por la gran ciudad era muy apretado ya que no quería llegar tan tarde a casa tenía una obra en proceso y por lo general nunca las dejo así, tengo la rara sensación que se puede perderel sentimiento y se arruinaría por completo, aparte a pesar que eran las 5:00 de la tarde sabía que al menos pasaría un buen tiempo dentro y otro mas cruzando la ciudad para poder llegar a cenar a casa y no congelarme con el transcurso de las horas, el invierno se comenzaba a presentar dando pequeñas caricias que terminarían en golpes a la cara, fríos y húmedos cuadros, eso era lo que meimportaba mas, tendría que cuidar mis pinturas de la humedad, mis manos dentro de mis bolsillos y mi reproductor musical sonaban suavemente, eso me ayudaba a no fumar mas, se me estaba convirtiendo en un vicio y estoy tratando de dejarlo, así que la música de “brian crain” me relaja, me ase respirar hondo y tranquilizar los nervios, de por si tengo muchas costumbres raras, solo tenía que cruzar la calle,el monito del semáforo estaba quieto así que me detuve y aproveche a buscar mi identificación universitaria, ya que Ana de la taquilla me hacia descuento de estudiante, y me ahorraba varios pesos, el semáforo reprodujo su típico sonido de avanzar, y me dispuse a cruzar con una cara de decepción puesto que no sabía si tenía el dinero suficiente para pagara el boleto a precio normal y regresar acasa, la vida económica de un estudiante y que compra mucho material para pintar es carísimo, pero en verano vendía mis cuadros en el centro de la ciudad y juntaba algo de dinero, lo guardo y lo vuelvo a invertir, no se necesita mucho cuando se es creativo, pase mi mano por la frente y ahí estaba Ana en la taquilla, estaba una gran lona con el nombre del autor y muchas de sus pinturas de fondo.
Anasonó como de costumbre, se acerco al cristal que nos dividía.
pregunte jugando con el borde de entrada de mis bolsillos mientras le veía a la cara con intriga.
me pregunto sorprendida.
esperaba un milagro.
me lo dijo como si le importara mi persona con una cara de decepción. señalo hacia la puerta principal sonde estaba Sebastián el guardia líder del turno.
recogí la mochila de untirante y me lo puse de nuevo, sonreí un poco y camine.
Revise de nuevo los bolsillos de mi pantalón, me detuve y saque todo el dinero que podría traer, la monedas frías sobre la palma de la mano sumaban 35 pesos, y en la otra un billete de 20 pesos, tenía problemas financieros, guarde las monedas pero el billete decidió danzar con la brisa de esa tarde, corrí tras el peor no se detuvo así quecorrí, y corrí encorvado tras el dinero volador, hasta que unas tres chicas lo detuvieron, me detuve en seco, una de la chicas extendió la mano entre riéndose mientras las otras dos chicas reían disimuladamente, creo que les provocaba risa mi situación.
dijo en tono de burla.
solo tome el billete y me di media vuelta.
Obviamente se reían de la situación, ya que puesto que su ropa cara y sus amigasrespingadas no aparentaban que les faltara algo en cuestión económico, mi cara quedo sin expresión y camine lejos de ellas, doble la esquina y solo hice negación, por lo que viví con ese tipo de gente, y así hay muchas personas en la universidad, y a pesar que ya había sobrevivido dos semestres en la facultad para comunicólogos siempre era lo mismo, todos conocer gente, todos hacen grupos,...