ASTURIAS
Versión 18/1/99
Salomón Kalmanovitz1
INTRODUCCION
Colombia se comprometió en los noventa con una serie de reformas estructurales y de
redistribución del poder político, en la dirección de reducir la discriminación contra las
importaciones y de tasar las actividades más en sentido de su contribución o freno al
crecimiento económico, altiempo que ocurría una descentralización del gasto. Lo
anterior debía acompañarse con un aumento de los impuestos internos al valor
agregado, en forma abierta y no subrepticia, donde todos los bienes serían ajustados
según criterios objetivos y no de origen nacional. El fin era permitir que se
manifestaran mejor las ventajas comparativas que tenía el país frente al mundo y que
canalizarahacia ellas el grueso de su ahorro. El Estado debía aumentar de tamaño y
proveer eficientemente los bienes públicos, descentralizando sus funciones. Los
resultados del decenio fueron, como se verá, distintos a los propuestos.
Lo que haré en esta ponencia es plantear unas características básicas del estado
colombiano frente a un modelo abstracto de un Estado democrático que se financia con
losimpuestos de sus ciudadanos. Después expondré las reglas de juego del
proteccionismo con relación al tema fiscal y que llevó a que se cambiaran esas reglas.
Haré entonces un balance de la situación fiscal colombiana y finalmente concluiré.
ANTECEDENTES HISTORICOS Y MODELO BASICO
Colombia viene de una tradición centralista y de una inconveniente unidad de Iglesia y
Estado que sólo se hanfracturado recientemente. El centralismo implicaba una tributación
sin representación que era férreamente resistida por los ciudadanos con subterfugios de
evasión y elusión. En este sentido, el Estado colombiano no ha ganado históricamente el
monopolio de la fiscalidad, ilustrado, entre otros, por organizaciones diversas que imponen
contribuciones forzosas, la evasión generalizada de impuestos o porla administración del
impuesto cafetero por su gremio.2 La segunda característica implicaba la ausencia de
libertad de conciencia, y por lo tanto, de expresión. Además, sí el Estado era legitimado
por la religión, entonces no aparecía como terreno y sometido a la racionalidad, sino como
lejano, eterno, intocable y aún milagroso. Por último, fuera de que los impuestos era pocos
y resistidos,recaían en buen parte sobre las importaciones o sea sobre los productores
extranjeros y sobre los consumidores domésticos de sus bienes. Era una forma
oportunística de obtener tributos que no recaían sobre el excedente doméstico.
El modelo democrático básico idealizado podría ser el siguiente: una comunidad que
alcanza a generar excedentes y en vez de apropiarlos todos privadamente decideimponerse
tributos proporcionales a la riqueza de cada cual y con ellos organiza su seguridad, su
salud, su educación, se dota de servicios públicos y construye las obras que lubrican el
crecimiento de su riqueza. Todas estas actividades las vigila la comunidad
cuidadosamente con instituciones, como un poder judicial, para garantizar los derechos de
propiedad y la seguridad, impedir desvíos,malgastos y apropiaciones personales. La
1
Codirector del Banco de la República. Los puntos de vista expresados son del autor y no de la Junta
Directiva del Banco de la República.
2
El mpuesto cafetero invertido en la misma región refleja una mejor y más eficiente asignación de los
recursos públicos como lo reflejan sus altos indicadores sociales y sería bueno ver el esquema repetido,
porejemplo, con un impuesto bananero, ganadero, etc.
2
asamblea de la comunidad decide sobre los tributos, controla a los ejecutores de las
políticas y les impone un equilibrio fiscal. En últimas, el Estado es la gente organizada,
contribuyendo todos a financiar sus necesidades.
Frente a este modelo simple hemos tenido una realidad muy distinta. La comunidad local
no tenía nada que decir sobre...
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