Aysen
Las recientes protestas ciudadanas en Aysén y el tenor de sus Demandas ponen, de algunaforma, el debate una vez más de los límites a los cuales puede ser sometida una comunidad que en forma histórica ha sido geográfica y políticamente postergada en temas de empoderamiento ciudadano.
Lalucha ciudadana de los Ayseninos ha logrado (al igual que hace un año en Magallanes) ubicar en la palestra el deseo para poner y reponer las agendas necesarias en el abordaje de los asuntos claves quepermitan remover los estáticos e impenetrables pilares del centralismo.
A pesar de la gran amplitud del movimiento social, a lo transversal de sus manifestaciones, a lo justo de sus demandas, alabandono histórico en que se ha incurrido con esta región, el gobierno central vuelve a hacer de la política del “supuesto” su principal prioridad antes de ocuparse efectivamente del problema.
Poneren tela de juicio el origen y naturaleza de estas manifestaciones arguyendo que venían “coordinadas desde Santiago”, señalar que es “Imposible regionalizar recursos”, o dudar simplemente delcontenido de las demandas, hacen suponer y consecuencialmente ratificar que existe una administración de gobierno que avala la sospecha, especulación y por supuesto la poca adherencia a un movimientociudadano, legítimo y que demanda reivindicar derechos que el asfixiante centralismo les ha ido enajenando.
Nos enfrentamos a un complejo escenario si no existe un diálogo efectivo y carente depolarizaciones políticas, nadie sabe si efectivamente el conflicto se solucionará de manera auspiciosa o si simplemente Aysén volverá a la normalidad, lo que si es claro e incontestable que gracias a la...
Regístrate para leer el documento completo.