Bajo un Atardecer de Acrilico

Capitulo n° 10

A la mañana siguiente el menor decidió volver a ensayar con su amigo Ray, si bien necesitaba un momento para poder alejarse de todo pensamiento que lo llevara a recordar a Gerard, esta era una muy buena manera de alejarse de aquello, luego de una rápida ducha, y de haber llamado a su amigo para saber si estaría aquella mañana disponible y que este le dijera que si, Frank semarchó de la habitación con su guitarra al hombro, y en el camino se desvió hasta la cafetería y compró cosas para compartir con Ray, al momento de ingresar a la sala de música donde su amigo impartía aquellas clases particulares, para poca grata sorpresa el pelinegro a quien tanto quería evitar volver a ver, se encontraba conversando con el chico.

- ¿Estás seguro Gerard?- preguntó el más alto
-Si Ray, yo lo…- fue interrumpido por el saludo imprevisto que el mayor le dirigió al chico que caminaba dudoso hasta donde ellos se encontraban
- Frank, al fin llegas- sonrió
- sí, pero creo que están ocupados, ¿no? Puedo regresar más tarde- evitó la mirada que el pelinegro le dedicó
- no, Frank, el que se debe ir soy yo, ustedes tienen clases, ¿no?
- bueno, sí, pero ¿por qué no nos quedamostodos?- preguntó el joven del afro
- no Ray, yo, me debo ir- bajó su mirada
- Gerard…- agregó el menor
- lo siento, me voy, no los quiero molestar- luego de decir esto, el pelinegro caminó con prisa para retirarse de aquel lugar
- Ray, ¿qué le sucede a Gerard?
- no losé, pero esta algo triste, no lo veía así hace mucho
- ¿hablaste con él?
- sí, pero…
- ¿pero qué? Dime, me preocupa
- Frank,¿por qué te preocupas tanto por él?- sonrió provocando que el menor se sonrojara
- por nada- susurró
- no me haces tonto Frank, algo escondes, y no te contaré qué hable con él, si no me cuentas que sucede
- no seas así Ray, por favor- suplicó
- lo siento Frank, pero necesito saber
- está bien, me gusta Gerard
- ¡lo sabia!
- ¿sí?- preguntó confundido
- claro, era obvio
- dios mío, ¿tanobvio soy?
- no tu, sino que, bueno, soy muy observador y me di cuenta de que algo había entre ustedes-sonrió
- pero no hay nada Ray
- eso es lo que tú crees
- ¿cómo es eso?- preguntó confundido
- bueno, ¿de qué piensas que Gerard me vino a hablar esta mañana?
- no losé
- piensa, Gerard Way no se levanta temprano por algo que no sea importante
- ¡ya dímelo de una vez Ray!
- de ti
- ¿demi?- preguntó con sorpresa
- sí, de ti
- y ¿de qué hablaron?
- bueno, dame una de esas donas que traes ahí, y soy libro abierto mi querido amigo
- nunca haces nada por gratis, ¿no? - rió
- la verdad no- comió de la dona para luego comenzar a responder la duda del menor- veras, Gerard te quiere
- no lo creo- interrumpió
- ¿me dejaras hablar?, si quieres te quedas con la duda, yo no tengoproblema con eso- rió
- está bien, me callo
- bien, tu le gustas, él te quiere, pero cree que tal vez no sea correcto, veras, Gerard ha pasado por muchas cosas en su vida, y bueno, dentro de esas esta una que lo marcó de por vida
- y ¿cuál sería?
- eso no te lo puedo contar, debe decírtelo él, debe saber que puede confiar en ti, ¿tu lo quieres?
- pero él tiene novia- bajó la mirada
- esa no fuemi pregunta
- sí, pero…
- pero nada Frank, intenta hablar con él, tal vez te estés haciendo problemas porque eres ciego, ¿no lo comprendes?
- no, ¿de qué hablas?
- Frank por dios, habla con Gerard, deja tu orgullo de lado, y búscalo, por favor
- está bien, ahora, ¿podemos comenzar la clase?
- bien alumno Iero- sonrió para luego tomar su guitarra y comenzar a enseñarle nuevos acordes al menorLuego de marcharse de aquel lugar, el pelinegro deambuló por el patio de la universidad, aun estaba confundido, sabía que su vida no había sido fácil, ni mucho menos con aquel secreto, que solo su hermano menor conocía, tras una media hora, el pelinegro caminó hasta su habitación, encontrándose con su hermano aun algo adormilado bebiendo café en el sillón de la sala de estar, dejó su chaqueta...