Boletín Y Elegía De Las Mitas

Vemos cómo la opresión, la injustica, el maltrato, el salvajismo, de parte de los españoles o conocidos como en esa época como los Viracochas. “Quiebra maqui de guagua;/ no quiero que sirva que sirvade mitayo a Viracochas”1, en contra de nuestros antepasados demostrando todo lo contrario de lo que ellos recibían. Recibieron maltrato aparte de físico que era en exceso muy exagerado, un maltratosicológico ya que sus madres preferían matar a su niño de meses de nacido, a que ellos cuando crezcan sean explotados por estos españoles.




Y a mama Susana Pumancay, de Panzaleo;
su chozaentre retamas de mil mariposas ya de aleteo;
porque su marido Juan Pilataxi desapareció de bulto,
le llevaron, preñada, a todo paso, a la hacienda;
y, al cuarto de los cepos en donde le enceparon laderecha,
dejándole la izquierda sobre el palo.
Y ella, a medianoche, parió su guagua
entre agua y sangre.
Y él dio de cabeza contra la madera, de que murió
Leche de plata hubiera mamado un día,Carajú! 2.


Aparte de sufrir maltrato, los Viracochas se abusaban de ellos en todo aspecto, como obligar a comer carne putrefacta y cobrarles por ello.


Y tú; señor Viracocha,
me obligaste acomprar esa carne engusanada ya.
Y como ni esos gusanos juntos

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1 César Dávila Andrade, Obras Completas (antología), Quito Editorial UCE 1990, p. 108
2 [ibídem] p. 111

pudopagar de golpe,
me obligaste a trabajar otro año más;
hasta que yo mismo descendí al gusano
que devora a los amos y al Mitayo!3.




Pero con la conquista, la salvaje conquista de losespañoles, nuestros antepasados se sintieron desolados y desamparados por su dios, quizás hubiera sido también nuestro dios en la actualidad. “Oh, Pachacámac, Señor del Universo, / nunca sentimos más heladatu sonrisa,/ y al páramo subimos desnudos de cabeza, a coronarnos,/ llorando con tu Sol” 4, vinieron he impusieron sus costumbres, sus tradiciones, su religión, que más que religión fue una opresión...