capitulo 8 y 9 de deadlock

TEMA8
En la cena hablé con Sheridan sobre mi accidente. El jefe de máquinas de acuerdo en que había antorchas de corte en la sala de máquinas. "Pero nosotros no mantenemos herramientas bajo llave.
"¿Estaba usted en la sala de máquinas de la noche? Le pregunté.
Me miró directamente a los ojos. -Sí, lo era. Y mi primer ingeniero estaba conmigo '.
'No es fuera de la vista del otro toda lanoche? \ "No es suficiente para dañar un coche mucho tiempo. '
Alrededor de las diez y media, nos trajeron una cama estrecha y unas mantas en el comedor para mí. Subí bajo las mantas en mis pantalones vaqueros y camisa, poner la Smith and Wesson a mi lado, y me fui a dormir casi de inmediato. Los cocineros me despertó antes de las seis, ya que comenzó a preparar el desayuno.
Después del desayuno meempaqué mi pequeña bolsa para una salida rápida: Bledsoe me dijeron que tendríamos unos dos minutos para pasar por encima de la cara de la Lucella a la orilla antes de que abrieran las compuertas de las esclusas y ella fueron a Lake Huron. Puse mi billetera en mi bolsillo de los vaqueros y poner el Smith and Wesson en la bolsa. Luego puse la bolsa en el piso y subí al puente para ver la diapositivaLucella en la cerradura.
Había cuatro cerraduras que cierran la caída de siete metros entre el lago Superior y el Lago Huron. Sólo un bloqueo, el bloqueo de Poe, era lo suficientemente grande para los barcos de trescientos metros. Fuimos la segunda nave en el Poe.
De Canadá Sault Ste Marie estaba a nuestra izquierda, el enorme Algoma
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fábrica de acero en la orilla. Después de cuarentaminutos, el capitán Bemis se le dijo por radio a entrar en la cerradura. Poco a poco hemos avanzado y el enorme madera y puertas de acero se cerró detrás de nosotros. Fui con Bledsoe a la cubierta.
Se tarda unos quince minutos para el bloqueo de vaciar sus siete millones de litros más de agua en el lago Huron. Unos turistas estaban viendo los barcos en las esclusas del lado americano. Vi a unhombre con el pelo de color rojo brillante recoger un par de binoculares y mirar a nuestro barco a través de ellos. Caminé por la cubierta para recoger mi bolsa. Yo estaba casi allí cuando yo estaba tirado en el suelo, el aire eliminado de mí. Al principio pensé que alguien me había golpeado. Pero cuando traté de resistir, me di cuenta de la cubierta temblaba debajo de mí.
El jefe de cocina estaba depie en el borde de la nave, tratando de aferrarse a los cables de acero. Vi con horror cómo fue arrojada hacia atrás y cayó por la borda del barco. Yo no entendía por qué estaban aumentando de nuevo cuando no había agua para empujarnos hacia arriba. Me sentía terriblemente enfermo. Bledsoe estaba de pie junto a mí, el rostro gris.
Hojas de agua se precipitaron entre los lados de la nave y lacerradura. Treinta metros por encima de nosotros el agua se precipitó, antes de caer a la cubierta, me golpea de nuevo. Quería cerrar los ojos, dejar fuera el desastre, pero no podía dejar de mirar. Un gran grito sonó por encima del ruido del agua. La madera se rompió y el barco se partió en dos. Nos quedamos de nuevo en la cerradura, cayendo en las puertas delanteras. Grano húmedo derramada de lasbodegas, que abarca todo el mundo con el barro de oro. La cubierta se movió bruscamente hacia abajo y se aferró a los cables de acero para que yo no estaba tirado en el centro. El barco roto quedó inmóvil.
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El aire estaba tranquilo después de la explosión. Me temblaban las piernas. Me froté los músculos doloridos de mi hombro. Bledsoe seguía de pie junto a mí, con los ojos vidriosos, elrostro gris. Quería decirle algo, pero las palabras no salieron. Una explosión. Alguien voló un barco de sesenta mil toneladas. Vi capitán Bemis bajan desde el puente.
'Martin. Nuestra nave. ¿Qué ocurrió?
'Alguien voló su nave, capitán. Las palabras vinieron de muy lejos. Bemis me miraba extraño: me di cuenta de que había pronunciado las palabras.
Bemis negó con la cabeza. 'No. No es mi...