carta a lector

Guayaquil, martes, 20 de agosto de 2013

Señorita María Fernanda Ampuero,
De mis consideraciones

El día de hoy le escribo porque he leído su artículo “Miedo y asco en Plaza Lagos”. Su artículome hizo caer en cuenta de que el racismo y el clasismo no son algo ajeno a nuestro país. Normalmente cuando uno piensa en racismo uno lo relaciona automáticamente con países grandes y poderosos comolos estados unidos, Inglaterra o Alemania. Países con movimientos interculturales gigantescos en los cuales muchísimas culturas distintas chocan las unas con las otras. Nunca se me ha ocurrido siquierarelacionarlos con pequeños países como este, países en los cuales las diferencias raciales y sociales están muy poco marcadas, la mayoría de la población es mestiza y se comparte un mayor sentido decomunidad, pero tristemente incluso aquí el racismo es un problema.
Me parece que no hay nada más bajo y vergonzoso que el racismo y me parece terrible que actos como los que se dieron en PlazaLagos puedan llevarse a cabo a la vista de todos sin que nadie intervenga. Más triste todavía que el echo de que incluso en este país haya gente capaz de sentir tanto odio irracional contra otros solo porel color de su piel o su estatus social es que la gente ni siquiera siente vergüenza de ser racistas en público sino que expresan sus pensamientos de odio e intolerancia en voz alta para que todoslos escuchen y nadie es capaz de siquiera pararse y decir algo al respecto, nadie es capaz de hacer que estas personas se den cuenta de su error y las ponga en su lugar o de hacer que estas personas sesientan avergonzadas de sus actos. Por el contrario, todos se quedan sentados escuchando cada palabra que estos tristes seres humanos dicen como si sus ideas retrogradas tuvieran valor alguno.
Loocurrido en Plaza Lagos es terrible y vergonzoso no solo para los presentes sino para todos los ecuatorianos. El hecho de que haya gente racista en ecuador es aceptable porque es imposible, al menos...