carta a un maniqui


Señor Gonzalo:
Usted dice que soy impura, vacía, insensible. No creo que sea la persona mas indicada para tratar de recalcarme lo que soy cuando usted simplemente se la pasa enlas cantinas conquistando mujeres. Yo creo en el amor de los hombres, mas no creo en el dichoso amor que usted espera, me parece que usted es demasiado romántico, que espera demasiadode las mujeres.
Me comporto con los demás de acuerdo a lo que se merecen. Yo no profano sus dioses, señor, no intente intervenir en mis creencias, tengo mi alma ¿quién dice que no? Ypor nada la cambiaría, mucho menos por un momento de fama.
Nunca quise embrujarlo, por el contrario, quise que se alejara de mí, pero como no lo hizo, me aproveché de usted, sin quese hiciera muy notable mi intensión. Usted fue uno más que calló en mis brazos, entonces ¿de qué se queja, qué quiere criticar?, todo me resbala.
Qué quiere hacerme sentir,¿tristeza?, ¿culpa? ¡Ja! No sea iluso, no tiene los pantalones suficientes para hacerlo. Todo siempre respondió a lo que usted me ofreció. La altura de mi minifalda la definía usted y de quéservía, si era larga o corta, usted siempre quiso mirar por debajo de ella.
Yo creo que su dios hizo muy bien en crearlo y desperdiciar un poquito del dichoso barro, ya que siemprehay que tener un modelo a seguir y uno a no seguir y creo que sobra decir cuál es usted.
Tiene razón cuando dice que no es un hombre a mi medida, pues tengo muchos como usted, aunquea ninguno le llega ni al hocico. No soy un objeto sexual al que pueda manipular a su antojo, siempre jugué con usted y esta ofendido solo porque sí supe utilizar cada una de misllaves.
Se libera de mi infierno, pues en un infierno vivirá usted luego de que mi espejo jamás lo vuelva a mirar.
Yo ya no existo, pues usted nunca existió, ¡Despreciable ser!