carta a un seminarista
Querido seminarista, tu eresya, esa imagen viva de Jesús, desde el momento tan especial en donde escuchaste su llamado, y día a día, luchas contra todo por parecerte más a Él, buscando ese sueño de abrir los ojos de los ciegos yliberar a los cautivos, sin darte cuenta que la gente te ve en tu esfuerzo diario, y en tu actuar liberas a todos aquellos que viven en las tinieblas y nos muestras a Jesús entregado, incondicional,amoroso y siempre al servicio de los demás.
El Señor conoce lo que elige, y tú has elegido por El, lo has dejado todo por El, y lo has encontrado a Él, máximo tesoro que el hombre puede tener en suvida, tú has decidido perder tu vida por El, por eso te eligió, y en El has encontrado ya una nueva vida.
Por eso mi más grande agradecimiento y respeto al que ha decidido darle el “SI”incondicional a Nuestro Señor Jesús.
Que Dios te guarde en su corazón y así en Jesús te proclame sacerdote, y que la virgen te envuelva en su manto y te lleve seguro cómo discípulo de Jesús.
Los admiro yrezo por ustedes.
Primero que nada: gracias. ¡Gracias por haber respondido al llamado con un generoso "sí"! Sabemos que la mies es mucha y los operarios pocos, y su respuesta afirmativa nos daesperanza de que aún en esta época de inmediatez y de exacerbado consumismo hay quienes son capaces de dejarlo todo y generosamente responder "sí".
Pero, por favor no se tomen tan en serio aquello deque recibirán el ciento por uno en esta vida y en la otra. Sé de muchos que en esa promesa se quedan, sus cabezas se llenan de humo y en verdad creen que todo lo merecen y les ciega la soberbia. ¡Enocasiones esta promesa nubla el entendimiento!
Doy por sentado que están aquí porque así lo decidieron libremente. De no ser así, será mejor dar la vuelta y tomar un nuevo camino. El único...
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