cartas a natalia

Esperanza Reig Vázquez

Barcelona, julio 2005

.... A atalia.
Podría dedicar estas páginas a mi
familia: a mis padres, a mi marido, a
mis tres hijos. Ellos ya saben que yo
los quiero en el alma. Te las dedico a
ti, Natalia, por hacer posible que las
aguas de nuestros ríos viajen juntas.

Barcelona, julio de 2006

Í DICE

Prólogo: Invierno de 2.001
I)
II)
III)
IV)
V)VI)
VII)
VIII)
IX)
X)
XI)
XII)
XIII)
XIV)
XV)
XVI)

11

Entre Moscú y los Urales
En occidente
La media naranja
Se inicia la carrera
Vida y papel
Más cerca. Más Lejos
El bebé de nadie
La promesa
El Globo terráqueo
¡ os vamos!
El flechazo
Volvemos sin él
Segunda espera
Strielka
La puerta cerrada
Un nuevo horizonte

13
19
37
43
47
71
79
83
91
105
131
161173
187
203
217

Final: Siempre la verdad

223

Fotos

229

I VIER O DE 2001.

Vladimir Putin dirige los destinos de la joven
Federación Rusa casi una década después de que
Mijail Gorbachov propiciase desde dentro del Partido
Comunista el inicio de una serie de reformas que
llevarían al fin del comunismo como sistema de
gobierno y de producción en la Unión Soviética. Su“perestroika”,
que
literalmente
significa
“reestructuración”, no sólo reformó la Unión de
Repúblicas Socialistas Soviéticas, sino que acabó con
esa Unión, y también con el propio Gorbachov como
político.
La URSS que fundó Lenin, desapareció 74 años
después. Muchos rusos aún
maldicen a Mijail
Gorbachov por ello.
A este lado, en mi mundo, el inicio de la
perestroika soviética, supuso el fin dela Guerra Fría:
Occidente respira tranquilo. Pero en la URSS, junto a
la ilusión empieza el caos. El sucesor de Gorbachov,
Borís Yeltsin alienta las sublevaciones nacionalistas y
un buen número de repúblicas acaban abandonando la
Unión:
Ucrania,
Bielorrusia,
Estonia,
Letonia,Lituania,Uzbekistán, Azerbaiján, Georgia….Lo
que queda, después de tanta segregación, pasará a ser
la nuevaFederación de Rusia, y Borís Yeltsin su
primer Presidente.
Una enorme crisis económica y social
acompaña la llegada del capitalismo a un mundo

educado para mirarlo y evitarlo como al diablo. Los
mercados, después de muchos años de estanterías
vacías, se abastecen de casi todo. Pero muy pocos
pueden comprar. Los sueldos caen en picado, los
precios se disparan, aparecen las mafias, quecontrolan muchos sectores, los jefes de la
omenclatura se convierten en los nuevos oligarcas,
pasando muchos funcionarios comunistas, de
directores de empresas públicas a dueños particulares
de esas mismas empresas, que ya no son “de todos”,
sino de ellos, merced a oscuros traspasos de
propiedad. La mayoría de la población sufre un cambio
que debería ser bueno, pero es demasiado rápido,demasiado traumático.
Conviven ahora nostálgicos del comunismo,
con eufóricos nuevos ricos, junto a una mayoría
desconcertada. La libertad ha abierto un difícil
camino a la esperanza.

I.

Entre Moscú y los Urales…

En enero de 2001, después de la Navidad
Ortodoxa, una ola de frío llega a Rúsia. Se alcanzan
temperaturas record bajo cero.
Sin que nadie lo sepa y a nadie interese, en un
lugarde la región de Ivánovo, una nueva vida acaba de
empezar. Es Él.
La ola de frío se va. Él se queda, escondido
como un pequeño polizón. No ha pedido permiso a
nadie. No le espera nadie en este mundo. Ni siquiera
ella. Aunque eso no es del todo cierto. Yo llevo media
vida esperándole.
Una mujer mira su vientre. Su sonrisa se hiela,
su corazón se encoge. Es una joven dependienta de
nombreNatalia. Eres tú.

Debió ser un día muy amargo para ti, un día
seguro muy frío del invierno de Puchezh; un día más
de un invierno blanco, de una vida gris, en una
pequeña ciudad cualquiera, de esas de aspecto aún muy
soviético, a orillas del Gran Volga.
A ti qué más te da si el Gran Río hoy está
precioso, plateado; si refleja las siluetas heladas de los
esqueletos de los árboles; o si...