Coordinadoras interfabriles en los 70

 Introducción

Nuestro propósito general en este trabajo es demostrar la facticidad histórica de la organización política independiente de la clase trabajadora argentina1, analizando en particular el proceso impulsado por comisiones internas y cuerpos de delegados combativos que dieron origen a las Coordinadoras Interfabriles del conurbano bonaerense para el año 1975. Buscaremos exponer lapeligrosidad que representó para el capitalismo vernáculo este tipo de hechos, como así tambien, el desbordamiento que las luchas obreras y populares produjeron en la tradicional contención del Estado y de sus organismos políticos afines.
Plantearemos una perspectiva de análisis diferente a las tres existentes tanto en el ámbito académico como en el político. Simplificando, ellas son: 1) la“justificación” del golpe por parte de las FF.AA. y sus grupos afines, en pos de “defender la patria”; 2) la “teoría de los dos demonios” que dominó la discusión durante los primeros veinte años tras la recuperación de la democracia burguesa en 1983; y 3) la teoría dominante hoy en día que, si bien en parte recupera las reivindicaciones propias de aquellos años, califica a los hechos ocurridos en los ´70como una excepcionalidad histórica irrepetible, una oportunidad desechada infantilmente y para siempre, buscando encauzar la lucha política dentro de los marcos “democráticos” (analogando “democracia” con “legalidad estatal”).
Para llevar a cabo esta tarea nos valimos de datos secundarios, escritos analíticos que expresan las diferentes posiciones antes mencionadas, documentos de época(panfletos, declaraciones de las organizaciones –en particular de las coordinadoras-, periódicos). Asimismo, pudimos contar con cinco entrevistas a protagonistas de aquellos años, y una a Ruth Werner, co-escritora del libro más reciente acerca de la temática.

Breve referencia teórica


“La organización es el principio fundamental de la lucha de la claseobrera por su emancipación. De ello se deriva que, desde el punto
de vista del movimiento práctico, el problema más importante es el
de las formas que debe asumir tal organización.”

Anton Pannekoek, Principios de organización, 1938

Siguiendo a Werner y Aguirre (2007), encontramos que a lo largo de la historia dela lucha de clases en Argentina, la forma concreta adoptada por los trabajadores han sido las Comisiones Internas y los Cuerpos de Delegados. De tales organizaciones de base se nutrieron las Coordinadoras Interfabriles a lo largo de toda su experiencia. Si tenemos en cuenta que ella se enmarca en la etapa histórica abierta por el Cordobazo de 1969 y cerrada por el golpe genocida de 1976,descubrimos que las coordinadoras son una parte, central y quizás la más importante, pero una parte al fin, de ese largo proceso de “inestabilidad” (ya mencionaremos, brevemente, otras experiencias obreras del período). La “inestabilidad” que azotaba al “período político” es la expresión necesaria de la “inestabilidad” del proceso productivo generador de ganancias. Siete años consecutivos ininterrumpidos(aunque con ascensos y reflujos) de paros, huelgas generales, elevadísimos niveles de combatividad y predisposición a la lucha, sobre todo reivindicativa, generan la “crisis política”. No se pueden explicar a posteriori semejantes reacciones y manifestaciones “por arriba” (dentro de las cuales el golpe genocida terminante es la expresión más acabada) sino se lo hace, primero, desde el corazón delmodo de producción. En Argentina, allí la clase obrera creó las Comisiones Internas y Cuerpos de Delegados.
Consejo de fábrica, comité de fábrica, “soviet”, son formas concretas que remiten directamente a la historia de la acción política de la clase obrera, a su autoorganización desde el interior del propio ámbito de trabajo. No es del interés de nadie forzar aquí analogías históricas...