Cronica
Cuando inicio el camino recordaba las historias de injusticia, venganza, miedo que llenaron en su momento las paginas de los diarios detodo el país , a medida que avanzaba evocaba que quien había estado detenido allí había sembrado sobre la ciudad una estela de terror; a pesar de encontrarse prisionero no se sentía libertad en elambiente y mucho menos justicia. A cada paso avanzaba hacia la cima y recordaba las historias en voz baja llenas de miedo de aquellos que habían perdido sus seres queridos por las bombas , losasesinatos callejeros, las desapariciones forzadas y lo que es peor aun aquellos que subieron a este lugar para encontrarse con el mas temido de los jefes con la intensión de satisfacer sus deseos y nuncaregresaron. El camino es empinado y solo pero contrasta con el ruido del agua que recorre por sus quebradas, la abundancia de la vegetación y el ruido de los pájaros entre los arboles.
A media que seacerca la carretera se hace mas amplia, ya se puede percibir el cielo que antes no podía hacerse por la altura de los arboles y llega a la cima, donde el viento sopla lentamente y se logra apreciar unaimagen placida y tranquila de Medellín. Voltea su mirada a lo que antes fue la temible cárcel de la catedral y el desconcierto se apodera de el ¿ como puede cambiar de forma tan abismal un espacio?Donde antes de veían las garitas de la guardia ahora lo saluda una imponente cruz de 30 metros en concreto como diciéndonos que el que reina ahora es otro.
Al entrar ve que las placas de concreto quefueron antes el piso de las garitas, habitaciones y comedores de los guardianes se han convertido en un apacible espacio donde ahora esta un oratorio y una capilla y se respira paz, tranquilidadhaciéndonos olvidar con la música gregoriana las imágenes de dolor que allí se vivían día a día. A un lado de la capilla esta el comedor , la cocina y la habitación principal del abad ( superior) de este...
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