Cuento
Siempre fieles a España y a su rey, estas sencillas personas anónimas pero que no por eso no sienten admiración por Carlos I nuestro Emperador, vuelven a escribir pero esta vez con un motivo especial: intentando exponer loshechos de la vida y muerte de nuestra reina Doña Juana ahora, cuando hace un año la muerte de la misma. Hemos intentado recoger testimonios sobre los hechos y a través de incluso fuentes secundarias, vamos a tratar de dar tal información al que quiera escucharnos que hasta tendrá conocimientos como para juzgar sobre el confuso caso, aunque bien sabe Dios que sólo nuestro monarca puede tomarsemejantes decisiones.
No con intención de fallar a nuestro Emperador Carlos I hemos decidido sacar a luz trapos sucios que no queremos que queden enterrados. Leales, fieles y sinceros:
Hijos predilectos de Dios como son los clérigos castellanos, nos han sido de gran ayuda en cuanto a la recopilación mediante fuentes escritas de sucesos relacionados con la demencia de Doña Juana pero anteriores alreinado de ésta. Éste es el caso de Isabel de Portugal, viuda de Juan II y madre de nuestra Sra. Doña Isabel la Católica. Su caso puede ser de gran importancia para aclarar algunos puntos negros de este caso.
Isabel de Portugal padeció una demencia que dicen tuvo las mismas raíces que por la que sucesivamente se reconoció que Juana I de Castilla había sido atacada. Muerto Juan II, Isabel pasó losúltimos 42 años de su vida encerrada en el castillo de Arévalo, dando muestras de locura al no cesar de gritar el nombre de Álvaro de Luna, valido de Juan II al que éste mismo había acabado decapitando. No resultó poco extraño que se dedicase a llamar a este hombre en vez de a su marido.
Todos sabemos también de la pasión con que nuestra reina Isabel la Católica amó a Don Fernando de Aragón. Como bienescribió un buen amigo nuestro, cronista de los Reyes Católicos: “amaba mucho al rey e celábalo fuera de toda medida”… Frecuentemente se contempló a nuestra reina aún joven llorando y quejándose a lágrima viva cada vez que Don Fernando se fijaba en otra mujer. El número no ocurrió sólo una vez: las lágrimas de amor de Isabel eran frecuentes.
Tal vez estos apuntes nos den a entender que en lafamilia de que Doña Juana era parte las pasiones desenfrenadas y las locuras por amor eran y habían venido siendo notables. Esto nos viene a deducir que los ataques de ira que dominaban a Juana podían no venir a ser más que pasiones que se le entregaron por herencia. Pero, ¿fue pasión juvenil o trastorno mental?
De niña, Juana acompañó alguna que otra vez a su madre Isabel a ver a su abuela, la yademente Isabel de Portugal. Juana no tenía idea por entonces de su futuro. En su infancia fue esmeradamente educada, de modo que bailaba muy bien, escribía perfectamente, hablaba las lenguas clásicas y era una gran aficionada a la música. Esta aplicación demostró que Juana era una niña inteligente. Pero la inteligencia nada tiene que ver con lo emotivo. A los 16 años, siendo Juana una adolescenteguapa y muy sentimental, la casaron con Felipe de Borgoña, al igual que a su hermano Juan lo casaron con la hermana de Felipe, Margarita de Austria. Pero el enlace entre Felipe y Juana no fue igual.
Estaba previsto casarlos cuatro días después de su encuentro, pero al ver Felipe delante suyo a una princesa de tal belleza e inteligencia, mandó venir a un capellán para que los casase de...
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