Cuento

Mi perro adorado
Era uno de eso días nublados a punto de llover y ahí sobre un charco de barro estaba peluchín embarrado de pies a cabeza, nada le importaba, por que el frío que en esos momentos sehacía sentir no pasaba su gruesa capa de pelo, era mediano y color blanco, blanco como la nieve, era un perro sumamente juguetón, y gran cuidador, fue recogido desde dentro de una caja todadestartalada y llena de pulgas, se puede decir que lo salvaron a tiempo. Peluchín llegó a un hogar inmensamente humilde, donde lo bañaron, lo desinfectaron y le pusieron un nombre después de un largo tiempo dediscusión, el pequeño y raquítico solo atinaba a mirar con ojos tiernos y juguetones. Pero el ya había elegido a su amo, una niña menuda con grandes ojeras y en silla de ruedas, que su madre llamabapipa.
Pipa que ya era atormentada por una extraña enfermedad desde hace mucho tiempo, sentía un cariño inigualable en aquel perro de ojos tiernos, en los momentos en que el espíritu maligno venía porsus visitas, el perro la comenzaba a lamer por todos lados y le hacía toda especies de gracias para levantarle el ánimo, ella lloraba de angustia sin que la vea su madre por que no podía ser normal,no podía jugar con aquel amigo de cuatro patas de hocico puntudo, y blanco como la leche, no aceptaba ser diferente, quería ser como las niñas de su edad, jugar, correr, ir a la escuela, sentirselibre, no prisionera, esclavizada por el resto de su vida por eso que la aquejaba, en verdad peluchín era una verdadera terapia para pipa que en los momentos más angustiosos le hablaba y sentía su lenguapor cara en signo de consolación, el perro había llegado a este mundo para verdaderamente salvar a esa criatura, sin nada en la vida más que su madre y por supuesto desde ahora en adelante, apeluchín.
El invierno estaba pasando y pronto se acercaba la primavera, tapizó de colores, de fragancias delicadas y frescas la ciudad que ante el crudo invierno parecía desolada, ocurrió a principios de...