Cuento

La montaña de los mil demonios.
En este mundo hay cosas que aún no podemos explicarnos, pero ese día, ese día fue traumante, pensé que jamás volvería a tocar si quiera de nuevo la realidad y deello sólo las secuelas quedaron.
Todo comenzó bajo el tenue manto de una luna de octubre, un 17 del mismo mes, historias antiguas relataban haber ciertas “criaturas de la noche” dentro del bosque, cosaque para ese entonces ignoré.
Miguel, Jesús y yo quisimos realizar una expedición dentro del bosque, disfrutar de un rato dentro de la naturaleza, convivir, y alejarnos un poco de los problemas queacarrea vivir en una monotonía, así que, salimos por la mañana con rumbo a la montaña de los mil demonios, al llegar notamos que el lugar era demasiado fresco, se respiraba un ambiente de tranquilidady paz, aunque durante el viaje un coche negro nos seguía, no tengo idea de quién pudo haber sido pero supe que debíamos enfocarnos en disfrutar ese día. Empezamos a caminar con nuestro equipaje,decidimos dejar el coche para poder disfrutar de la naturaleza pisando las hojas secas, nos encantaba el ruido al oírlas crujir, después de caminar unos cuantos kilómetros, en medio de dos roblesgigantescos yacía una cabaña deshabitada, era pequeña pero lucía acogedora sólo un poco polvosa, pero serviría para poder pasar la noche ahí, así que nos adentramos en ella, la cabaña contaba sólo con unospocos muebles 2 camas y 1 sofá parcialmente destruidos, rasgados, parecía como si un gato hubiese arañado toda la casa, señales de polvo por donde quiera y totalmente vacía, decidimos dejar nuestrascosas dentro y salir un rato a escalar. La escalada resultó perfecta, aunque Jesús fue asustado por una serpiente, ésta sólo saco su lengua como intentando apartarlo e infundiéndole miedo parecía muymolesta por el hecho de que estuviéramos ahí, después Miguel, Jesús y yo sólo continuamos nuestro camino, poco a poco empezó a caer la noche, era uno de esos días donde la niebla baja y sólo puedes ver...