cuentos latinoamericanos buen resumen

LATINOAMERICANOS
HOMBRE DE LA ESQUINA ROSADA
Yo conocí a francisco real aunque no lo trate más de tres veces, pero es noche que no se me olvidara. Rosendo Juárez: el pegador, era uno de los más duros de villa santa Rita; Sin embargo una noche nos mostró su verdadera condición.
La historia de esa noche empezó por el corralero aquel que iba a pelear y a matar. Esa noche los muchachos estábamosdesde temprano en el salón de julia, entre el camino de Gauna y el Maldonado. A mí me toco una compañera que iba adivinándome la intensión y el tango hacia su voluntad. En esa diversión estaban los hombres, que había visto junto con el corralero y cuando menos pensé aumento la música, entonces al pasar un rato llamaron a la puerta con autoridad, un golpe y una voz.
Cuando entro, para nosotrosno era todavía francisco real, pero si un tipo alto y fornido. Me golpeo la hoja de la puerta al abrirse y de atolondrado me le fui encima, pero este solo se estiro y me hizo a un lado, entonces siguió más alto que cualquiera. La cosa no duro ya que en el montón siguiente ya estaba el inglés esperándolo, y fue así que el corralero herido y arrastrado fue empujado hasta donde Rosendo y limpiándosela cara dijo:
Yo soy francisco real hombre del norte y al que le dicen corralero, estoy buscando a un hombre que dicen por ahí que tiene fama de cuchillero, de malo y que le dicen el pegador. Entonces dicho esto el hombre tenía un cuchillo y lo sacó a relucir mientras que todo estaba en silencio. Mientras tanto Rosendo seguía callado y francisco real volvió a desafiarlo y el a negarse. En esasla lujanera se dirige a su hombre y le saca un cuchillo, Entonces Rosendo lo coge y lo tira hacia afuera, a perderse en el Maldonado. Yo sentí como un frio.
De asco no te mato- dice el corralero y se va con la lujanera.
Debí ponerme colorado de vergüenza, yo hubiera querido salir de esa noche. Rosendo me pego un codazo, y se escabullo por los lados del Maldonado. Yo luchaba por sentir que a míno me representaba nada el asunto, pero la cobardía de Rosendo y el coraje insufrible del forastero no me querían dejar.
Afuera oímos una mujer que lloraba y una voz la llamaba desesperado, era el corralero y vimos que traía una herida fuerte en el pecho; la lujanera lo miraba como pérdida, pero consiguió hablar y dijo que luego de salir con el corralero les cayó un desconocido y le atravesó unapuñalada y que no sabe quién es.
El hombre se moría mientras que la policía se acercaba y era mejor echar al muerto al arroyo. Cuando echaron un medio vistazo los de la ley, el baile estaba medio animado.
Yo me fui a mi rancho, me apure a llegar cuando me di cuenta. Entonces volví a sacar el cuchillo corto y filoso lo revise otra vez y estaba como nuevo, inocente y no quedaba ni un rastro desangre.
LOS FUGITIVOS
El rastro moría al pie de un árbol. Había un fuerte olor a negro en el aire, pero el perro estaba cansado, sin embargo él estaba en otra búsqueda: olor a hembra.
Las sombras se hacían más húmedas. Perro se volteo, cayendo sobre sus propias patas, las campanas le enderezaron sus orejas y hecho a correr hacia el monte, pero olía a hebra. De pronto perro se desvió de la pistainvisible, se detuvo dejando una pata en suspenso. Unos ladridos, muy lejanos descendían de la montaña.
Perro sintió miedo y hecho a correr en sentido contrario hasta que oscureció. Ya no olía a hembra, olía a negro. Y ahí estaba negro dormido, entonces decidió que era mejor quedarse al lado del hombre por ahora ruñendo huesos de costilla mientras se calmaba la pelea de perros.
Por hábito,cimarrón y perro se despertaron cuando sonó la campana y la revelación de que habían dormido juntos los enderezo de un salto.
Perro y cimarrón decidieron irse juntos. Ahora perro estaba mucho más atento al olor a blanco, olor a peligro. Perro había cambiado de bando.
Poco a poco olvidaron los tiempos en que habían comido con regularidad y Se devoraba lo que se agarrara mientras dormían en una...