Cuentos y leyendas

Páginas: 13 (3104 palabras) Publicado: 20 de marzo de 2012
Los Diablos del Monte
Don Lobo, un experto montaraz, iba casi a diario cazar Huanganas en un monte lejano y solitario. En la busca de los cerdos salvajes, encontró un día, un bosque de wicungos con sus frutos ya maduros, frutos que son el alimento predilecto de estos animales salvajes. Los recogió y llenó su bolsa de chambira.En el suelo, quedaban aún las frescas pisadas de las Huanganas , sedijo a sí mismo don Lobo. Esa información fue suficiente para él y retornó a su casa contento de su suerte. Al día siguiente regresó al mismo lugar para levantar una barbacoa, una especie de altillo, desde donde dispararía a sus presas.Como era un experto, no tardó demasiado tiempo en construir la barbacoa. Sacó sus pertrechos de caza. Sus cartuchos envueltos en un plástico, su infaltable cigarrosiricaypi y su linterna de cuatro pilas. Su cuchillo nuevo de cocina brillaba en lo alto.Después de regar los wicungos debajo del árbol, el montaraz se subió a la barbacoa y templó rápidamente su mosquitero viendo que los zancudos aparecían por miles. Y antes de entrar a refugiarse de los insectos frotó su cuerpo con unas hierbas hediondas, para que los animales no sientan su presencia.Y mientrasesperaba la llegada de la manada de Huanganas, pensó: “Si vienen cien Huanganas en la manada, trataría de matar sólo cincuenta", se decía emocionado, pero los cerdos no llegaban, y seguía hablándose a sí mismo: “con cincuenta tengo para sacar quinientos soles.."Sacando sus cuentas, el montaraz, ocupaba su mente en la soledad del monte. Pero, los animales no aparecían y la noche avanzaba, felizmentepara don Lobo la luna alumbraba el bosque con su luz amarilla y en los claros era fácil distinguir a cualquier animal.De pronto, comenzó a percibir el griterío de los animales. “¡Ya vienen!", se alegró el montaraz.Inmediatamente preparó su arma. Cargó su linterna con las pilas nuevas que había comprado en la bodega, y por una rendija del mosquitero, con el cañón del arma hacia afuera, espiabaatento cualquier movimiento.Repentinamente los gritos se alejaron, al parecer, las Huanganas habían elegido otro wicungal ese día.Al poco rato, le sobrevino un sueño al cazador, y para no dormirse encendió su cigarro. Y ocupó su mente otra vez para no caer en los brazos de Morfeo. “Con la plata de la venta, me compraré dos pashnas preñadas. Que nazcan, pues, seis de cada parto, tendría doce, más lasdos madres, tendría catorce. A las doce de la noche, cuando cabeceaba de cansancio, unos gritos extraños le despertaron. El sabía que las voces no eran de las Huanganas, ni de los Sajinos, era ya muy tarde para que sean ellos, por eso prestó mayor atención. Después de unos minutos vio, que por el camino de los cerdos, se acercaban hacia él varios hombres, humanos como nosotros, vestidos de negro ycon el rostro cubierto hasta la nariz por un trapo rojo.Se sentaron debajo del altillo. Prendieron sus lámparas y sobre una mesa improvisada comenzaron a jugar a las cartas. Apostaban bastante dinero. Jugaban con monedas que brillaban como si fueran de oro.Don Lobo, ahora sí que empezaba a asustarse..Terminado el juego se entretuvo escuchando durante horas algunas historias de cómo esos hombresse habían perdido en la inhóspita selva. Contaban, con lujo de detalles, lo que les había pasado. Uno de ellos contó que encontró en su camino a un hombre que le hizo perder en el bosque con mentiras de encontrar mejor caza en la falda de un cerro. Otro contó que una manada de tigres negros comenzaron a perseguirle día y noche, pero que, aparentemente no le querían comer, sino asustar.El montaraz,que ya estaba a punto de dormirse cuando llegaron los diablos, se despertó del todo al oír una historia que le impresionó, dijo el hombre, que regresando de mantear, sus perros lo desconocieron y comenzaron a ladrarle como si fuera un extraño. Dijo que trató de conquistarles con caricias, pero los canes no permitían que se acerque. Entonces no tuvo más remedio que hacer uso de su arma y...
Leer documento completo

Regístrate para leer el documento completo.

Estos documentos también te pueden resultar útiles

  • Cuentos Y Leyendas
  • cuentos y leyendas
  • Cuentos y Leyendas
  • El cuento y la leyenda
  • Cuentos Y Leyendas
  • Cuenta La Leyenda
  • Cuentos y Leyendas
  • Cuentos Y Leyendas

Conviértase en miembro formal de Buenas Tareas

INSCRÍBETE - ES GRATIS