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Hubiera querido que esa noche dure eternamente, pero la realidad fue otra.
Después de tomar un par de tragos, lo más probable era que al día siguiente no recordarasu rostro, su voz, su cabello; mucho menos iba a recordar su nombre. De lo que estaba seguro era que jamás iba a olvidar, sus suaves besos sabor a miel, sus labiosmisteriosos y cada segundo más brillantes a causa de la luz de la luna que se colaba entre los rincones oscuros del bar y de su corazón.


Alguna noche de marzo— Podrás lograr todo lo que te propongas en la vida.
— ¿Todo?
— Sí, todo.
— ¿Y si me propongo a hacerte la mujer más feliz de todo la cuadra y lo que queda delmundo? 
— Veremos… 

La chica de la esquina.

Pocas son las veces en las que probé la felicidad completa, y la mayoría fue gracias a ti



— He encontrado auna chica que roza la perfección. Ahora solo me queda esperar a que ella me encuentre a mí.

Esas pocas palabras

— ¿Quién es esa chica?
— Tú la conoces
—¿La conozco?
— Ella era, es y siempre serás tú.
En la tardes de enero se dedicaba a respirar las nubes y a recordar las más de quince mil doscientas cuarenta y dosilusiones que guardaba y cuida en su corazón.



Es como la luna, que se cuela en los demonios del sol por las tardes y reina junto a las estrellas cuando seeleva la noche.

La luna representa a una chica, ella se colaba en los pensamientos del joven por las tardes, cuando tenía sus clases de piano, y reinaba en su cabezapor la noches cuando soñaba despierto.




Una noche de julio, con los pies en el suelo y la esperanza rozando las nubes.

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