Desarrollo Económico y legitimidad política” Seymur Martin Lipset

Cuando Lipset postula como uno de los requisitos mínimos de democracia el desarrollo económico me pregunto si este es propio o preponderante dentro de una democracia. Si analizamos el caso de Chiley su crecimiento económico, lo podemos ver como un proceso que se desarrolla a partir de un modelo instaurado por la dictadura, nos evidencia que el crecimiento económico se puede dar en distintostipos de regimenes y no aportan necesariamente a la democracia, si no que pueden ser simplemente hechos independientes que se entrecruzan.
El crecimiento económico si bien, puede ser visto como unagente potenciador de las democracias al otorgar segurar y estabilidad a los países, también es es un factor altamente vicioso y generador de males democrático como lo son la corrupción, tráfico deinfluencias etc.
¿En qué aporta realmente el crecimiento económico a la democracia? Con un alto crecimiento económico tenemos ciudadanos más preocupados en qué consumir que en qué pensar. Traspasan susnecesidades al consumo y éste las satisface y no se preocupan del sistema político y cómo este podría ayudarlos a solucionar sus problemas y los de la comunidad. Ante este panorama con este tipo deciudadanos la maniobra es fácil: crear un sistema de participación en donde los ciudadanos son manipulados a partir de distintas estrategias comunicacionales cuidadosamente diseñadas para llamar suatención y ser capaces de acudir a las urnas a escoger representantes, representantes que poco se preocupan de sus intereses y necesidades una vez electos.
Se ha generado un sistema llamado democracia,el cual se ha convertido en una manera de hacer creer a los ciudadanos que escogen a ciertas personas, que a su vez son solo servidores de grandes empresarios que a su vez responden a sus necesidadesfinanciando sus campañas para ser electos y llegar a cierto grado de poder.
Democracia, a fin de cuentas, se ha convertido sólo en la nebulosa que hace creer a las personas que son escuchadas y...