Detencion Preventiva En El Sistema Acusatorio

I. EL PROBLEMA.
1. TÍTULO.
“CRITERIOS SEGUIDOS POR LOS JUECES EN LA APLICACIÓN DE LA DETENCIÓN PREVENTIVA, COMO MEDIO DE ASEGURAMIENTO DEL PROCESO EN CASO DE TRAFICO DE DROGAS, EN PANAMÁ, AÑO 2011.”

2. JUSTIFICACIÓN.
La investigación que nos corresponde desarrollar se orienta hacia un tema de gran trascendencia en cualquier estado de derecho; un tema polémico en todo país que hayaalcanzado un determinado nivel de madurez social, política y jurídica, nos referimos a la figura de la detención preventiva o prisión provisional contemplada en el nuevo código de procedimiento penal de Panamá.
En el plano doctrinal, por razón del casi irresoluble conflicto con el derecho a la presunción de inocencia.
En el plano legislativo, por cuanto ese conflicto interno genera gran número dereformas y contrarreformas legales en gran número de países, entre ellos, Panamá.
Asimismo, en la opinión pública, que reclama una justicia inmediata.
Y es que no podemos olvidar que la detención preventiva constituye un elemento accesorio, subordinado a aquel cuya eficacia persigue, pero sin menoscabo injustificado de las garantías del procesado, entre las que podemos destacar, el derecho a lapresunción de inocencia. Exige un proceso cuyo aseguramiento se persiga a través de una detención preventiva concebida en términos del mayor respeto por las garantías y derechos fundamentales redundaría, necesariamente también, en un fortalecimiento del Estado de Derecho.
Lógicamente, el reforzamiento de las garantías constitucionales y legales en las decisiones relativas a la detención preventivaconducirá a la consideración preferente de alternativas menos lesivas para el derecho fundamental a la libertad reconocido a todo individuo y, en especial, a toda persona que no ha sido todavía condenada mediante sentencia en firme.
En consecuencia, es de esperar una disminución, a mediano plazo, del número de presos preventivos. Aunque no es este el fin primordial perseguido, a pesar de que elhacinamiento de las cárceles panameñas no es ajeno, por supuesto, a nuestras preocupaciones. Pero es lícito pensar que un mejor conocimiento de la institución, de su naturaleza, presupuestos y caracteres, un intento de renovar los criterios interpretativos de la legislación vigente y un cambio de actitud sobre los jueces sobre el tema que nos ocupa alejará el automatismo de la decisión, la inercia decontinuar por caminos trillados que pueden condenar a la opinión pública, a los funcionaros policiales, al Ministerio público o de instancias superiores en algunos casos, pero que inquietan a todo ciudadano, y, sobre todo, a cualquier jurista sensible a las veces necesaria pero siempre dolorosa, anomalía que supone privar de libertad a quien no ha sido declarado culpable de alguna infracciónpenal. No se trata de prescindir de la prisión provisional, sino de conocerla mejor, de usarla con mejor criterio y solo en casos sumamente necesarios, y de ello, muy posiblemente, se siga el efecto, inevitable y deseable en la situación actual, de utilizarla, también, en la menor medida.
Como observamos, esta institución trae consigo varios efectos y consecuencias que afectan el sistema carcelario,donde la gran cantidad de sus huéspedes están detenidos de manera preventiva en espera de un fallo que determine su situación legal.
Pero esto va más allá, su uso descontrolado por decirlo así, atenta contra el principio de presunción de inocencia y la libertad que son garantías fundamentales que consagra nuestra Constitución.
Se ha tratado de justificar la adopción de esta medida, como mediopara combatir la delincuencia, lo que los tratadistas llaman Derecho Penal del Enemigo para calmar a la sociedad, que reclama mayor seguridad.
Es por ello que en el afán de cumplir con los supuestos deberes del Estado, no se hace más que violar en forma flagrante los principios de presunción de inocencia y de proporcionalidad, inherentes a un Estado Democrático, y actualmente con el...