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19/10/13

Dennis Hopper | Celuloides en su jugo

s ardientes
by Pablo

A Dennis Hopper le recordaremos siempre por Easy Rider, donde participó en el guión, dirigió y actuó. También como
elborrachín de Hoosiers, el reportero gráfico de Apocalypse Now, el padre de Christian Slater en Amor a quemarropa y,
en menor medida, el villano de Speed. Incluso, últimamente, como un estupendofotógrafo.
A buen seguro no pasará a los anales del cine por el otro puñado de cintas que dirigió, incluida Lab ios ardientes, una
suerte de híbrido entre el cine negro y el erótico que hemos estadotentados de incluir no en esta sección del blog, sino
en la más proscrita Celuloide Bizarro. Si finalmente la hemos considerado digna de Fast Food es porque, siendo
justos, no es una película mal hecha,por más que la profusión de carne la orille hacia cierto subproductos más
cochinos que otra cosa. Tiene sus hallazgos, sus cosas buenas, y no deja de ser un pasatiempo cachondo y juguetón,
algobizarro, sí, pero sobre todo contemplada la cinta 25 años después.
En su momento, ver a Don Johnson al frente del cast tenía un impacto muy distinto. El guaperas de Don venía en plena
cresta de la olagracias a su papel de poli fucker y molón en Corrupción en Miami y aprovechó para lanzarse a una
incursión en la gran pantalla que no se puede calificar de memorable. Y eso que Don no está mal en Labios ardientes.
Digamos que, simplemente, no daba más de sí. El papel, sin duda, le venía como anillo al dedo: un forastero solitario y
apuesto que llega a un pueblecillo muerto del asco y se busca lavida en un negocio de venta de coches, aunque pronto
queda claro que el banco local le interesa poderosamente.
Y no es lo único. Macho alfa con poca competencia en un entorno tan miserable, prontose lanza a la conquista de una
guapa compañera de trabajo interpretada por una jovencísima Jennifer Connelly, al mismo tiempo que intenta quitarse
de encima a la ninfómana esposa del jefe...