Ejercicio argentina

Argentina 2011: Tiempo de elecciones

Gustavo Álvarez Z.
Analista político

A partir del año 2001, se produce en la política Argentina un fenómeno que lo podemos denominar la “conurbanizacion del poder”, resultado de un proceso de erosionerosión de los proyectos de gobierno que han intentado gobernar el país a lo largo del siglo XX, con la consiguiente eclosión del sistema bipartidista[1].Los mismos que, a travestravés de medios democráticos o no, intentaron imponer su visión de país como única, prescindiendo del interlocutor opositor necesario a todo juego democrático. Así nos encontramos, que ante el proyecto agro-exportador de índole liberal-conservador, aparece el radicalismo con la exigencia de institucionalidad política y transparencia electoral como forma de hacer unademocracia representativa[2]. Frente a este panorama se le opone la alianza militar-liberal-conservadora, cuyo interés común consistía en mantener el statu quo[3].
Ante esto va a surgir con fuerza el peronismo, como movimiento popular representativo de las necesidades de los más necesitados, ampliando las demandas del radicalismo, en cuanto a la necesidad no solamente de reconocimiento político, sinotambién de reconocimiento social y económico[4].
Desde su surgimiento, el peronismo se ha transformado, en virtud de sus características, en el protagonista central de la política Argentina. Sin embargo, su presencia en la política Argentina, no ha sido siempre sencilla en la medida de su conflictividad interna, y del rechazo que generaba ante la pretensión homogeneizante de los otros proyectosantagónicos. Por su origen, el peronismo ha tenido una marcada hegemonía en el territorio de mayor concentración poblacional de la Argentina, el conurbano bonaerense[5]. Según el último censo, en este viven casi diez millones de personas, de las cuales tres millones son pobres[6].
Dicha región surge a partir del proceso de industrialización sustituyente de importaciones que se da en la Argentinaa partir de los años treinta del siglo pasado[7]. Este fenómeno, lleva a que se de una demanda de mano de obra que es cubierta en parte por los flujos de migración interna, que se transforma de campesino a obrero industrial[8]. También se da un flujo de inmigración europea, que ante la ausencia de oportunidades en Europa, ven en América la tierra del porvenir. A medida que se va dando el paso deltiempo, va aumentando la cantidad de población en este territorio, sin darse una presencia del Estado en la mejora de la infraestructura necesaria[9]. La misma, corre por cuenta de la sociedad civil, la cual mediante asociaciones de fomento, se hacía cargo de que se den las condiciones de “habitabilidad”. Así se fue dando, un crecimiento exponencial de esta zona que era atractiva para aquellosque buscaban una “nueva vida”, dejando sus territorios de origen. Así, encontramos en esta zona, un cúmulo de identidades diversas, que forman la identidad del conurbano, como mosaico de culturas regionales, que se juntan a habitar un lugar común[10].
Sin embargo, a partir del golpe militar del año 1976 el sueño industrializador empieza a difuminarse, causa de las políticas económicasaperturistas del mercado y con la disminución de los apoyos estatales al consumo y la inversión que eran fundamentales para su existencia. Esto trajo como contrapartida, el aumento de la pobreza en esta región que representaba una nueva oportunidad[11].
Este fenómeno no se revirtió con la llegada de la democracia sino que por el contrario, con más o menor medida se fue provocando un deterioro de lacalidad del trabajo, que no ha sido modificada por ninguno de los gobiernos sucesivos[12].
Así, en 1983 al restaurarse la institucionalidad democrática con el triunfo del radical Raúl Alfonsín, las áreas más pobres del Gran Buenos Aires ya estaban en emergencia[13]. Esto se da con el peronismo, que tiene su base electoral entre la población más necesitada, fuera del poder nacional y provincial....