el acto de escribir de Santiago Kovadloff

Páginas: 31 (7541 palabras) Publicado: 28 de mayo de 2014
Trabajo y Sociedad
Indagaciones sobre el trabajo, la cultura y las prácticas políticas en sociedades segmentadas

Nº 11, vol. X, Primavera 2008, Santiago del Estero, Argentina
ISSN 1514-6871 (Caicyt-Conicet) - www.unse.edu.ar/trabajoysociedad

El acto de escribir
Santiago Kovadloff*
I
Creo poder remontar la corriente que me trajo hasta este oficio. Escribir ha sido desde siempre loúnico que quise. Desde siempre, no: desde que ya no pude jugar. No poder jugar fue mi derrumbe. Mi primera experiencia del tiempo como catástrofe; de mi identidad como incertidumbre.
Sí, una zozobra absoluta. Días y días vacíos. De pie en mi cuarto, en el jardín, viendo llover detrás
de una ventana, la mirada errante sobre un mundo hueco. Enfermo por el amor que se fue.
No sabría decir cuánto duróesa agonía. ¿Hubo transición? Me parece que fue un salto, una
fuga del dolor. Mis soldados de plomo estaban tibios todavía cuando empecé a escribir. Nunca me
resigné a dejar de jugar. Nunca me resignaré. Y ya tengo más de sesenta años.
Empecé a los trece. Recuerdo el papel. Hojas sueltas, planchas levemente opacas, perladas,
de un blanco atenuado por una pátina gris. Allí mi mano dejaba suestela de tinta azul profundo.
Mi padre me daba esas hojas. Cada resma era nutrida y pulposa. Ignoro de dónde provenían. ¿Qué
era aquello? ¿Papel de envolver? Me gustaba. No escribía en cuadernos. Mi trazo regular cubría las
hojas amorosamente. Las iba llenando con mi letra ostentosa, que se deslizaba y caía sobre la
derecha, como desplomándose. Letra diáfana, lenta, como la de hoy. Allíprolongaba yo mis correrías
imaginarias a caballo por las cuadras de mi barrio. Pistola al cinto o en mano, atento a las acechanzas
de apaches y cuatreros, me deslicé desde mis juegos a las palabras. Aún recuerdo un título: "Diez
mil dólares en oro". Hubo una mediación: los libros. Leía hechizado. Mi cuerpo leía. Todo mi cuerpo.
Los libros también eran juguetes. Y más: los acariciaba, me gustaba lapiel de las páginas, las olía.
Como a una mujer. Ellos fueron el residuo palpitante que me dejó la infancia cuando se apagó. La
materia que facultó mi renacimiento. Desde entonces nada me importó más. Leer, escribir. Resucité.
Volví a tener un mundo.
Los desvelos que me producen mis desaciertos de padre y marido me atormentan menos que
mis imperfecciones de escritor. Sigo siendo un niño queperdió su casa tras la muerte de su
infancia. No falta sin embargo quien, con humor y clarividencia, diagnostique que la mía es una
conclusión conscientemente encubridora y por lo tanto hipócrita. Bien sé —me aseguran— que tan
mal padre no soy, ni un marido desastrado; en consecuencia, no podía escapárseme que lo realmente preocupante, por hondas e irremontables, son mis falencias de escritor. Seacomo fuere: si no
escribiese, me ahogaría. La vocación no responde a la certeza sobre el propio talento. Es una pasión.
Se nutre de su propia necesidad, de su ímpetu y no de la excelencia eventual de sus frutos. Yo
podría durar sin escribir pero no sabría vivir sin hacerlo. No lo sé desde hace casi cincuenta años. Ya es
demasiado tarde para aprender a pasar el tiempo. Lo senil para mí es lavida sin literatura. Al escribir
me rebaso, me trasciendo, voy más allá de mi literalidad; de esa pátina de obviedad en que la rutina
ahoga lo viviente. Al escribir asciendo, planeo, respiro un aire más puro. Ahondo lo que de otro modo
*

Filósofo y escritor. E mail: santiagokovadloff@icatel.net

2
se me extravía en la dispersión, en la impropiedad, en la falsa claridad de la costumbre.Detesto lo
inequívoco, lo rígido, lo inmóvil. Al escribir, todo se convulsiona, vuelve a temblar, se desplaza, me
convoca. Me contoneo al escribir, bailo, me bailo. Hurgo, encuentro, pierdo, busco. Las palabras arden
y queman en la urgencia que siento de decir. Aciertan o marchitan lo que tocan, según sea la gracia
que inspira su despliegue. La vocación las baña, las depura, las hospeda. Pero...
Leer documento completo

Regístrate para leer el documento completo.

Estos documentos también te pueden resultar útiles

  • Acto De Escribir
  • El Acto De Escribir
  • El Cuerpoel Oficio De La Pasión Por Santiago Kovadloff
  • Acto Patron Santiago
  • ¿Que Significa Preguntar? (Comentario Del Libro De Santiago Kovadloff)
  • Acto dia de la autonomia de santiago del estero
  • C Mo Escribir Un Segundo Acto
  • El Acto de escribir

Conviértase en miembro formal de Buenas Tareas

INSCRÍBETE - ES GRATIS