el amigo de ña kikaa

“La llaga” fue publicada en Buenos Aires en 1964, luego de haber ganado el prestigioso premio literario argentino Kraft, el año anterior. Cronológicamente fuela cuarta novela de Casaccia, luego de “Hombres, mujeres y fantoches” (1929), “Mario Pareda” (1940) y “La babosa” (1952). Pero dejando de lado las dos primerasexperiencias citadas ­escritas en plena juventud­, se puede afirmar que “La llaga” es la segunda gran obra novelística del referido autor, y en ella se asientauna historia intrincada que luego continuará en “Los exiliados” (1966).

A los aspectos freudianos hallados por varios estudiosos en la relación entre laviuda de Cantero y su hijo Atilio, se entrelaza la violencia explícita instalada por la dictadura de un general que llevaba 10 años de férreo régimen. Esaautocracia despiadada signa la vida de casi todos los personajes de la historia determinándoles un destino nunca deseado. La figura del dictador está presente en la vidacotidiana de esos refugiados en la bucólica Areguá; está vivo en sus odios, en sus frustraciones, en sus resentimientos sin pausa; marca su convivencia con unacrueldad palmaria.

En “La llaga” queda patentizado que todas las dictaduras del mundo son iguales. Iguales en su ferocidad, en su saña, en su brutalidad.Iguales en su persistencia en perseguir a sus adversarios aun en los rincones más escondidos, como esa Areguá de los años que giraban en torno a la revolución de1947, que era entonces un pueblito perdido, desfigurado tras haber sido un centro de veraneo de las familias patricias de Asunción entre los años ’30 y ’40.