El Bucon don Pablos : el picaro sin honra ni virtud




El Buscón don Pablos: el pícaro sin honra o virtud.
“ Iba yo entre mi pensando en las muchas dificultades que tenia para profesar honra y virtud, pues había menester tapar primero la poca de mis padres, y luego tener tanta que me desconociesen por ella.” (El Buscón, 177-78).


La novela autobiográfica de La vida del Buscón don Pablos (1626) es testimonio a la imposibilidad que tieneel pícaro de adquirir honra y virtud. Ya de joven, Pablos pasa hambre, sufre maltratos, y tendrá que comprobar que sus sueños de fama y honra en la corte no se hacen realidad , como tampoco lo ve en ninguno de los personajes relacionados con la fama y el poder (el hidalgo don Toribio o el soldado). Pero al final de la novela, Pablos aprende , después de haber viajado al Nuevo Mundo para probarsuerte, que sólo se puede mejorar de estado quien muda también de “vida y costumbres” . (Buscón, 308)
Manuel Durán, en la introducción a su libro Quevedo contra Quevedo (23), nos informa sobre la trayectoria en la vida del famoso autor: noble educado, de gran éxito como poeta y diplomático, amigo del duque de Osuna, valido del rey Felipe III, a quien acompaña en varios viajes. Pero llevado mas porla vanidad de su ingenio que por su inteligencia y prudencia, escribió sátiras contra la monarquía que le causaron su fama y salud, ya que el conde duque envió a Quevedo a la cárcel durante los últimos cinco años de su vida.
Es relevante como Pablos elige en su relato a personas de diferentes oficios y clase social: clérigos, soldados, nobles, damas, picaros y alcahuetas.
El clérigo deCabra se supone debe cumplir con la caridad básica de alimentar a sus huéspedes. Pero no es lo que hace:
”Solo añadió a la comida tocino en la olla, por no sé. [ ] Parecióle después que en esto se gastaba mucho, y dio en sólo asomar el tocino a la olla.” qué que le dijeron, un día, de hidalguía allá fuera” [ ]. Don Diego y yo nos vimo tan al cabo , que, ya que para comer, al cabo de un mes, nohallábamos remedio, le buscamos para no levantarnos de mañana.” (125) .

Pablos se encuentra a un soldado que desprecia la corte, porque no estimaron su valor:
“Si he estado ahí seis meses pretendiendo una bandera, tras veinte anos de servicios y haber perdido mi sangre en servicio del Rey, como lo dicen estas heridas?”. Domingo Ynduráin en su edición de El Buscón comenta que en lasRelaciones históricas toledanas (pg. 235) de S. De Orozco, un soldado fue castigado por “reniego” signo de ser, dice Pablos, un “picaron gallina” (191).
Se apena de “las calamidades” del hidalgo don Toribio (210):
Yo le dije que le aseguraba que me había persuadido a muy diferentes cosas de las que veía. –“Pues aun no ha visto nada v. m.” - replicó-, “que hay tanto que ver en mí como tengo,porque nada cubro. Veme aquí v. m. un hidalgo hecho y derecho, de casa de solar montañés, que, si como sustento la nobleza me sustentara, no hubiera mas que pedir. Pero, ya, señor licenciado, sin pan y carne, no se sustenta buena sangre, y por la misericordia de Dios, todos la tienen colorada., y no puede ser hijo de algo el que no tiene nada”. (208-209).

Edward H. Friedman opina que a vecesnotamos la intervención del autor y podemos notar discrepancias entre la focalización del protagonista pícaro y la focalización del autor (83). Hay algunos críticos que piensan que esta novela refleja el ejercicio lingüístico barroco, mientras que otros como Edwin Williamson (1977) piensan que la narración es una variación barroca de la picaresca, ya que Pablos estaría del lado de la historia, yQuevedo del lado del discurso.
Domingo Ynduráin comenta que mientras que el pícaro Lazarillo muestra el poder del dinero desde su posición: “con fuerza y maña remando salieron a buen puerto” (Lazarillo de Tormes, p.11), Pablos cuenta con su habilidad: “Consideraba yo que iba a la corte, adonde nadie me conocía, que era la cosa que mas me consolaba, y que había de valerme por mi habilidad”...