el caballero del azor
Páginas: 2 (256 palabras)
Publicado: 20 de enero de 2015
La obra El caballero del azor pertenece al genero literario narrativo ya que hay un narrador que relata la historia.
El tipo denarrador que existe en esta historia es un extradiegetico que es aquel que relata los hechos desde fuera, como un narrador testigo que todo lo ve,todo lo sabe y que tiene la capacidad de penetrar en la mente y en los sentimientos de los personajes, un ejemplo de la existencia de este narradoren esta obra es el que esta ubicado en el capitulo III Párrafo 1 y 2:
Llegó la noche medrosa y sombría. En aquella soledad asaltaron aPlácido mil ideas tristes. Los recuerdos de la niñez surgieron en su mente con claridad extraña.
Recordó que seis años hacía le habíanarrojado de otro asilo con severidad y dureza harto diferentes. Desde muy niño, desde el albor de su vida, de que no tenía sino muy confusasmemorias, se había criado en el castillo del terrible don Fruela, poderoso magnate de la montaña. El castillo estaba en una altura muy cercana de lacosta. Desde allí ora salía don Fruela con buen golpe de gente a caballo para penetrar en tierra de moros y talar y saquear cuanto podía, oraembarcaba a sus satélites en algunas fustas y galeras de su propiedad, e iba a piratear o a dar caza a otros más crueles piratas que infestabanaquellos mares e invadían y asolaban a menudo las costas de España; eran los idólatras normandos de Noruega y de la última Tule.
El tipo denarrador que existe en esta historia es un extradiegetico que es aquel que relata los hechos desde fuera, como un narrador testigo que todo lo ve,todo lo sabe y que tiene la capacidad de penetrar en la mente y en los sentimientos de los personajes, un ejemplo de la existencia de este narradoren esta obra es el que esta ubicado en el capitulo III Párrafo 1 y 2:
Llegó la noche medrosa y sombría. En aquella soledad asaltaron aPlácido mil ideas tristes. Los recuerdos de la niñez surgieron en su mente con claridad extraña.
Recordó que seis años hacía le habíanarrojado de otro asilo con severidad y dureza harto diferentes. Desde muy niño, desde el albor de su vida, de que no tenía sino muy confusasmemorias, se había criado en el castillo del terrible don Fruela, poderoso magnate de la montaña. El castillo estaba en una altura muy cercana de lacosta. Desde allí ora salía don Fruela con buen golpe de gente a caballo para penetrar en tierra de moros y talar y saquear cuanto podía, oraembarcaba a sus satélites en algunas fustas y galeras de su propiedad, e iba a piratear o a dar caza a otros más crueles piratas que infestabanaquellos mares e invadían y asolaban a menudo las costas de España; eran los idólatras normandos de Noruega y de la última Tule.
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