El derecho a una muerte digna. (por: sleither fernández)

EL DERECHO A UNA MUERTE DIGNA

Del griego eu, bien, y thánatos, muerte, es que se deriva la palabra eutanasia, por lo cual es considerada como “buena muerte” o en muchos casos como “muerte digna”, y es aquel procedimiento médico que consiste en adelantar de forma asistida la consecuencia mortal a aquellos pacientes afectados por enfermedades terminales con su previo consentimiento o no.
Uneterno debate se ha producido en torno a este tema, gracias a las diversas opiniones que sobre el se expresan y que han originado una gran cantidad de conflictos legales, médicos, religiosos, filosóficos y sociales, entre otros. El aspecto central de esta discusión, se enfoca en el derecho autónomo que tiene el afectado de decidir sobre el destino de su propia vida; y es que en realidad, ¿por quéestá obligado el enfermo terminal a extender la dura pena de una existencia indigna, al padecer de una enfermedad que le genera daños irreversibles a su ser y que jamás podrá ser curada? Por ese entonces, es que la eutanasia debe ser permitida, claro está, solo en casos extremos y con la condición de que el afectado lo solicite.
Aunque muchas personalidades se han encargado de repudiar laacción, muy pocos, o quizás ninguno, se han hecho la interrogante antes mencionada y mucho menos se han dedicado a encontrarle una respuesta racional o coherente, cegados simplemente, entre otros factores, por la idea de que la ética y la moral del médico que emprenda el acto, se verán afectadas o, que solo Dios es aquel que tiene potestad sobre nuestros cuerpos y solo él decide el momento“adecuado” para nosotros dejar de existir. Ahora bien, si la labor del médico es velar por la buena salud y el bienestar del paciente, ¿por qué ha de ser criticado si este último le solicita, agravado ya en su situación, el deseo de fallecer y de no seguir extendiendo las duras condenas de la enfermedad fatal, que no solo están enmarcadas bajo el ámbito físico, sino también en el aspecto psicológico,espiritual, social y emocional?; y si hasta el catolicismo, entre otras religiones, permite la llamada pena de muerte como sanción penal en algunos casos, ¿por qué motivo repudia el derecho a una defunción menos dolorosa por parte del enfermo terminal?. Pues, simplemente son contradicciones de un obvio carácter ilógico que muy difícil podremos comprender
Sócrates y Platón sostenían la idea de que elpadecer de una enfermedad dolorosa, era una razón más que suficiente para dejar de existir. Por ello, es que Humphry y Wickett (1989), afirman que los griegos fueron los pioneros en el consentimiento del suicidio asistido, aunque este se permitiría bajo el cumplimiento de ciertas condiciones. Era una decisión aprobada por el Estado, y no solo eso, sino también amparada por el mismo, debido a quelos gobernantes disponían de un veneno destinado a aquellos que deseaban morir, otorgando a su vez, una autorización oficial, la cual expresaba lo siguiente:
“Quien no desee vivir debe exponer los motivos al Senado y una vez lo haya recibido, puede quitarse la vida. Si la existencia te resulta odiosa, muere; si el destino te es adverso, bebe cicuta. Si la pena te abruma, abandona la vida.Dejad que el infeliz relate su desgracia, dejad que el magistrado le proporcione el remedio para que él mismo pueda ponerle fin” (p.19).
Sin embargo, los autores destacan que para los siglos I y II, en el cristianismo se condena el hecho y como efecto, la Iglesia transforma de manera radical sus leyes, imponiendo no otorgar cristiana sepultura a aquel que atentara contra su propia existencia.Aún así, para la época del Renacimiento, y con la ratificación de los principios griegos y romanos, la concepción de una muerte menos agónica, iba progresivamente convirtiéndose de nuevo en un ideal importante.
En evidencia, este ha sido un tema muy delicado a lo largo de la historia, pero por lo que más se está en lucha es por la defensa del “derecho a morir” que tiene el enfermo terminal,...