EL ENSAYO

EL ENSAYO

Hilario Topete Lara (ENAH-INAH)

Es bueno saber que alguien ya ensayó sobre el ensayo y mejor aún que se haya realizado de una manera poética porque el ensayo para mí siempre ha sidouna apuesta de la creatividad y, en tanto tal, el útero de nuevas ideas, conocimientos; pero que lo haya hecho una amiga carece de calificativos (a menos que haya algo más allá del superlativo). Loescribo para Ana Clavel de quien recibí un poema de ensayo (sobre el ensayo) desde el mundo de las letras, sin embargo, soy antropólogo y docente.
Como docente suelo proponer las formas de evaluación ycuando alguien con voz en cuello propone “¡Ensayo!, suelo hacer algunas aclaraciones, mismas que recordaré en las siguientes líneas. Como verás, Ana, coincidimos en mucho, pero también nosdistanciamos. Veamos.
Ciertamente, el ensayo está destinado a seducir: seduce con argumentos con la fulgurante propuesta de un paraíso que es como la promesa del amante que, sin desnudar al otro, se desnuda así mismo para darse, para ofrecerse mientras sueña con que el otro haga lo mismo y se entregue; he allí la trampa, una red con aroma de promesas que pueden proponer el paraíso aunque tras el halopueda encontrarse la puerta hacia el infierno. NADA SE LE EQUIPARA EN SU LONGEVIDAD, NI EN SU INTENCIONALIDAD. TODO ES UNA ELONGACION
Pero es también un bravucón, un provocador egocéntrico y timorato:golpea y sonríe: gusta de ser seguido pero teme ser perseguido. No es un dictador ni un Dios: está desprovisto del don de la infalibilidad y carece de medios para la coerción.
El ensayo es un peónpuesto en el tablero de ajedrez: es tan útil y tan valioso como cualquiera otra pieza: suele poner en jaque aún a las piezas más poderosas (valiosas) y, bien conducido, puede coronarse y salir de sucrisálida convertido en reina, o torre, pero nunca rey. Un peón puede ganar una partida o puede simplemente ser pieza de sacrificio. Es una pieza de juego o hasta el juego mismo. Por eso, es un...