El Mimo Y El Clown
de respeto. Así pues, ya vemos que estamos hablando de gente no muy bien considerada: “ademanes ridículos”, “género más bajo”, “mamarracho”. Gente que ha sido censurada, rechazada, ensalzada o despreciada según épocas y gustos. Gente irreverente, espíritus libres que han hecho de su arte burla del poder, las normas, la religión (durante muchos siglos decristianismo el mimo lo tuvo muy difícil). Mimos, clowns, bufones, magos, volatineros, titiriteros, etc., componen un abigarrado conjunto de gentes que son considerados como un especie de patitos feos de las artes y de la sociedad. En el Imperio Romano el mimo tenía su sitio en los descansos o al acabar la representación de una tragedia, y su actuación servía para “ayudar a secar las lágrimas delos espectadores”, como declaraba un escoliasta de Juvenal. Y cuando consigue más popularidad entre los romanos su lugar será los ludi florales, que estaban colocados bajo el signo de arte menor. Incluso hubo, en el siglo XIII, un famoso trovador de la corte de Alfonso X de Castilla, Guiraut de Riquier, que pidió a su señor que “fijara una nomenclatura exacta para distinguir a los representantesnobles de los vulgares dentro del estamento de los comediantes, pues era totalmente injusto que los recitadores, con cuyas canciones y versos bien compuestos se deleita un público cortesano,
jesús jara
se igualaran con los bufones, payasos, volatineros, prestidigitadores y domadores, que desempeñan su oficio en los mercados públicos ante todo el pueblo”. Y es que, aunque mimos y clowns hanconocido épocas de gloria y respeto para algunos de ellos, la mayoría ha encontrado en la calle su lugar natural de expresión y en las gentes sencillas sus mejores y más habituales espectadores. Y llegados a este punto hay que preguntarse ¿porqué? Evidentemente, en gran medida porque quienes se dedicaban a este oficio pertenecían al pueblo y sus chanzas golpeaban, frecuentemente, a los poderosos.Pero habría también otras causas más profundas. En mi opinión, el clown y el mimo entroncan con algunas de las actividades más cotidianas y gozosas del ser humano: la risa, la gesticulación, la ternura, la imitación... ¿Quién no ha escuchado, contado algún chiste, la más popular de las formas del humor? El hombre necesita reír, para comprender, para conocer, para crecer y asimilar su realidad. ¿Yquién no ha tenido la tentación o la necesidad de imitar a alguien, de comunicar con las manos, el gesto, superando la expresión verbal, o el idioma, o los ruidos? El ser humano recorrió un largo camino hasta llegar al lenguaje hablado y escrito, y sin duda ese camino forma parte de nuestro inconsciente
colectivo, de nuestra herencia genética. Un bebé expresa y siente, gesticula y ríe mucho...
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