El Negro

De esclavo a cubano. El negro en las miradas de José Antonio Saco y de José Martí.
Ponencia al congreso de LASA en San Francisco, Estados Unidos, del 23 al 26 de mayo de 2012.
Pedro Pablo Rodríguez
1. La sociedad esclavista cubana.
A lo largo del siglo XVIII, y particularmente en su último decenio, a impulsos del fin de la esclavitud que trajo la revolución haitiana, la colonia española deCuba vivió un creciente proceso de asimilación de esclavos como base productora de su inserción en el mercado mundial capitalista de la época a través de las producciones de tabaco, azúcar y café.
El primer cultivo, ya importante desde un siglo antes se sostenía en pequeñas vegas en las cercanías de los ríos trabajadas por pequeños campesinos libres, buena parte de ellos inmigrantes canarios,aunque en la región oriental sobre todo no fueron pocos los vegueros negros y mulatos libres. El azúcar y el café exigían numerosos brazos para los altos volúmenes de sus exportaciones, y para ello ya había experiencias previas en las Antillas Menores, Saint Domingue, Brasil y el sur de Estados Unidos. Dadas las condiciones de entonces y esas prácticas anteriores, la introducción masiva de esclavosafricanos, inducida además por los beneficios del comercio triangular, resolvió la enorme demanda de trabajadores para las faenas agrícolas y las elementales tareas fabriles requeridas para sus ventas al exterior.
En algo más de un decenio, la esclavitud coloreó a plenitud la colonia y la transformó de una pieza estratégica para el imperio español por su posición geográfica, de lento crecimientopoblacional, y de oligarquías locales prestigiadas por la propiedad de la tierra y las exportaciones de cueros, en una sociedad de patrones modernos asentada en la gran plantación agroexportadora. Sin predominio absoluto, pues se mantuvieron los pequeños artesanos y cultivadores libres blancos y negros, y con las regiones centrales y orientales mantenidas aún a la vieja usanza, la plantaciónesclavista marcó los rumbos del país, y la sacarocracia habanera se impuso como el sector social dominante y se expandió por la fértil llanura habanero-matancera hasta Sagua y Cienfuegos. Pero la esclavitud se apoderó de todos los intersticios de la sociedad más allá de la misma plantación, se derramó por la vida doméstica y urbana y no fue raro el caso hasta de esclavos dueños de esclavos.
El racismo yla discriminación por el color de la piel caracterizaron las relaciones sociales y tendieron a sepultar los rasgos patriarcales anteriores entre amos y esclavos. La plantación, particularmente el ingenio de azúcar, devoraba vidas a veloz ritmo (un esclavo apenas sobrevivía más de cinco años
en aquellos molinos humanos), y nunca sabremos con mediana exactitud cuántos millones de africanos quedaronpara siempre en los campos cubanos.
Para los años 40 y 50 del siglo XIX más de la mitad de la población insular era de color, y se calcula que unos 400 mil esclavos formaban su núcleo principal.
Las consecuencias fueron nefastas para la sociedad en todos sus aspectos y, dentro de ellos, en la definición de sus procesos identitarios y de formación nacional. La sociedad esclavista se tradujo enpatologías sociales profundas asentadas en la exclusión y la desunión brutales e implacables por el color de la piel (nunca hubo esclavos blancos), que detuvieron o retrasaron el reconocimiento y la conciencia de una comunidad insular con características e intereses propios, singulares y originales.
2. José Antonio Saco.
Durante el segundo tercio de aquel siglo XIX un destacado intelectualexpresó quizás con mayor brillantez que otro alguno las contradicciones de aquella sociedad esclavista, de la que fue crítico consecuente y víctima a su vez. José Antonio Saco (1797-1879), prosista consumado y sagaz polemista desde su juventud sintetizó en su misma persona el drama del país. Nacido en las filas de la anticuada oligarquía bayamesa de la tierra, soñó toda su vida con aquella sociedad...