El poder de las palabras

El poder de las palabras
”La prieta” de Gloria Anzaldúa y Lenguaje poder e identidad de Judith Butler parecieran dos obras que para nada tienen relación, o al menos eso pensé yo en un principio, pero al leerlos comprendí lo que se nos quería transmitir: somos seres lingüísticos, seres que dependen del lenguaje para existir, son las palabras las que tienen poder sobre nosotros, a veces poder deconstruir, transformar, perjudicar e incluso herir, en palabras de Butler
Hacemos cosas con palabras, producimos efectos con el lenguaje, y hacemos cosas al lenguaje, pero también el lenguaje es aquello que hacemos. Lenguaje es el nombre de lo que hacemos: al mismo tiempo de aquello que hacemos (el nombre de una acción que llevamos a cabo de forma característica) aquello que efectuamos, el acto ysus consecuencias.1
Por ello, cuando decimos que el lenguaje hiere estamos afirmando que el lenguaje está actuando, nos está hiriendo, pero esto no podría ocurrir si no dependiéramos del lenguaje para existir. Al decir esto, no es que se nos esté hiriendo literal, aunque de cierta forma es un daño que se da indirectamente, ya que la ofensa que se diga perjudicara a la persona, y según Butler serinsultado es de las primeras formas de agravio lingüístico que uno aprende, el problema radica en ¿Qué palabras hieren?, porque incluso podrían ser todas, sin embargo se nos explica que depende básicamente del contexto en que se digan, “Cierto tipo de palabras harán daño bajo ciertas circunstancias. Pero las circunstancias solas no hacen que las palabras hieran”2 esto quiere decir, que no solo esel contexto sino también las palabras, las personas, la intención, etc.
Y si analizamos el texto de Gloria Anzaldúa, desde un principio nos imaginamos a donde nos conduce su obra (que más que obra es una autobiografía) ya que, con el simple hecho de nombrarlo “La prieta” nos está anunciando que hablara de cuestiones polémicas: de racismo, crítica a la sociedad, etc.
Este término “prieta” esuna manera despectiva de “apodar”, el cual no solo está sujeto a la persona a quien se le nombra así, sino que al ser llamado con un nombre insultante uno es menospreciado y degradado, aunque ciertamente el nombre es una de las condiciones por las que un sujeto se constituye en el lenguaje, y según Althusser es uno de los ejemplos de la interpelación.
Butler nos dice que algunas formas de insultoracial producen síntomas fijos que temporalmente dejan inválida a la víctima. Estas formulaciones sugieren que el daño lingüístico actúa como una herida física, sin embargo las dos heridas son comparadas de una manera metafórica, de hecho no existe una un lenguaje específico para el problema de daño lingüístico de tal manera que nos vemos obligados a tomar prestado el vocablo del daño físico.
Otrode los puntos que me parecen de suma importancia es que constantemente Butler repite que dependemos del Otro para existir, necesitamos ser nombrados para aparecer en el momento, pone dos ejemplos:
1) En uno, un policía nombra a una persona que va caminando, con un “¡Eh tú!” y la persona que va caminando gira para ver al policía, pues está siendo llamado, y antes de ser llamado no existía en lavida del policía, era un transeúnte que pasaba por ahí.
2) Otro ejemplo es el de “Pedro”, no podría haber un Pedro sin el nombre de Pedro, y Pedro no existiría sin el nombre que proporciona la garantía de su existencia, he ahí la importancia de los nombres.
Butler dice que el nombre nos constituye socialmente, pero nuestra construcción social tiene lugar sin que nos demos cuenta. “El nombre quellevamos la designación que nos confiere singularidad depende del otro. Aunque otros compartan nuestro nombre, el nombre posee una generalidad y una historicidad que no es de carácter singular y a pesar de ello parece tener el poder de conferir singularidad”3
Cuando se dice que el nombre tiene una historicidad, se entiende como la historia interna al nombre del sujeto, en el caso de “La prieta”,...