El Secuestro De La Princesa Lasaña

Mi nombre es Francesco Caruso cocinero y dueño del restaurante Pinocchio, famoso por tener los mejores platos de pasta de toda Italia.
Os voy a contar una historia que sucedió en el restaurante entre la princesa Lasaña y el príncipe Canelón, todo comenzó así:

La cocina es el lugar donde conviven dos reinos, el reino de la Despensa Rosa y el reino de la Despensa Azul.

La princesa Lasaña esla más bella de todas las pastas, viste un traje de bechamel y lleva un perfume que huele a queso parmesano, vive en la Despensa Rosa junto a su padre el rey Tortellini, su madre la reina Espiral, los soldados Espaguetis y su comandante Tallarín.

En el reino de la Despensa Azul vive el príncipe Canelón, viste un traje de pasta blanca bañado con tomate, también viven su padre el rey Ravioli, sumadre la reina Concha, los soldados Macarrones y su capitán Fideo.

Todo estaba tranquilo en la cocina, la convivencia entre los dos reinos era muy buena y se ayudaban unos a otros. Las Plumas y las Ruedas preparaban la bechamel todos los días, las Estrellas y las Letras trituraban el tomate, el Rissoni picaba la carne, todo se hacía perfectamente para que la pasta estuviera en su punto y losclientes disfrutaran de mis platos.

Los más solicitados por supuesto eran la Lasaña y el Canelón. Todos los días se formaban grandes colas de gente para degustar estos dos platos.

Como todos los Lunes, el restaurante permanecía cerrado por descanso y las pastas aprovechaban para celebrar una fiesta por lo bien que iba todo. La fiesta se celebraba una vez en cada reino y era donde coincidían elpríncipe y la princesa. Paseaban por todo el largo de la mesa de la cocina y hablaban de cómo les iba todo, la verdad, es que estaban enamorados el uno del otro, pero no se atrevían a decirlo.

- ¡Hola Lasaña! ¡Hoy estas muy guapa!- dijo Canelón.

-¡Gracias Canelón!- contestó Lasaña mientras se sonrojaba.

-Tengo que darte una noticia- dijo Canelón – tengo que irme de viaje durante unosdías.

-¿Dónde vas a ir?- preguntó Lasaña.

-Voy a visitar el nuevo salón que va a inaugurar nuestro dueño Francesco- contestó Canelón- me han dicho que es muy bonito.

-¡Ten mucho cuidado con el gato!-dijo Lasaña.

-¡No te preocupes princesa! –dijo Canelón.

Todo estaba preparado, el príncipe Canelón acompañado del capitán Fideo y de seis soldados Macarrones, se despedian de los reyes.Les esperaba un largo y peligroso viaje a través del extenso pasillo, hasta llegar al nuevo salón que se iba a inaugurar. Tenían que tener sobre todo mucho cuidado con el gato negro del malvado Fideuá.

Fideuá habita por todo el restaurante, excepto en la cocina. Odia mucho al resto de las pastas y todo, porque al no tener éxito mis platos de Fideuá con los clientes, decidí no incluir ningúnplato de él en mi menú y él decidió abandonar muy enfadado la cocina y esconderse por el restaurante, donde conoció al gato negro y desde entonces son amigos.

Fideuá pensó un plan al enterarse de que el príncipe se dirigía hasta el salón, habló con el gato y le dijo:

-Tú te quedarás en el pasillo esperando a Canelón, mientras, yo me dirigiré a la cocina, ¡No me tienen que descubrir!

-¡Asílo haré!-contestó el gato.

Dos soldados Macarrones iban por delante del capitán Fideo y del príncipe Canelón, parecía que el pasillo estaba despejado, ¡de repente!, el gato pegó un salto y con una de sus garras golpeó a los dos soldados. Mientras los otros cuatro soldados entretenían al gato, el capitán Fideo pudo colocarse por detrás de él, se subió a una mesa y empujó un vaso que había encimacayendo en la cabeza del gato, dejándolo inconsciente. Por suerte los dos soldados solo tenían unos rasguños y pudieron continuar el viaje hacia el nuevo salón.

Mientras ,Fieuá una vez dentro de la cocina se dirigió a los terrenos del reino de la Despensa Azul, buscaba al sargento Tiburón, antiguo amigo suyo, y ahora ,a cargo del ejercito de los Macarrones por la ausencia de su capitán.

El...