El trabajo dignifica

EL TRABAJO DIGNIFICA
Personajes:
― Ciudadano: vestido de hombre de la calle (pantalón y camisa).
― Díaz-Herranz: Hombre. Cuarenta años, vestido con traje y aspecto de ejecutivo dinámico.
― Zapaznar: al principio es igual que Ciudadano pero después lleva un cetro.
― Botón: Hombre. Sesenta años, con traje y tirantes.
― Sr. Mercado (es Botón pero con gafas)
Todos de cara al público. Dederecha a izquierda del escenario: Ciudadano y Zapaznar
sentados en sillas. Díaz-Herranz en una mesa y Botón en una mesa más grande y
lujosa.
Ciudadano y Zapaznar están sacando bolas de papel de un saco y dándoselas al sr.
DÍAZ-HERRANZ. Una la dejan en una cesta en su mesa y otra la ponen en un tobogán
que la lleva a una cesta en la mesa de Botón.
ZAPAZNAR (a Ciudadadano): ¿Tú crees que, deverdad, es necesario que hagamos este trabajo
todo el rato? No me siento tan dignificado como nos prometieron. … Un poco sí ¿eh? … Pero
no mucho.
CIUDADANO: Yo no sé. Yo soy un mandao.
ZAPAZNAR: Pero seguro que, al menos, nos pueden dar algo de esto que sacamos del saco.
CIUDADANO: Psé. Eso sí. Pero ¿quién se lo dice? Al fin y al cabo es el sr. DÍAZ-HERRANZ el
que tiene que negociar con el sr.BOTÓN, que es un hueso duro. Hay que estar muy preparado
para hacer su trabajo.
ZAPAZNAR (mirando al sr. DÍAZ-HERRANZ con cierta duda): Sí … De todas formas, nosotros
somos más. Algo podremos hacer.
CIUDADANO: A mí no me líes. Tú dile lo que quieras.
ZAPAZNAR (medita un rato mirando al sr. DÍAZ-HERRANZ. Decidido, se acerca a hablar con
él): Ejem … sr. DÍAZ-HERRANZ.
sr. DÍAZ-HERRANZ (mirando alcielo y con repentino y visible enfado): ¡Ya estamos parando la
producción! ¡Así nos vamos a la ruina! ¿No ves que si dejas de dignificarte esto se hunde?
ZAPAZNAR (bastante cohibido): Sí … bueno … Es que … Ciudadano y yo hemos pensado que,
como somos los que estamos sacando las cosas del saco … pues que … vamos si puede ser,
que si no pues nada … pues que, a lo mejor, no le supone a ustedproblema que nos quedemos
con una parte de lo que sacamos. Pero una parte pequeña ¿eh? No se crea usted que nos
estamos comparando con usted. Que no es eso. Es que … vamos … que pensamos que igual
a usted no le importaba mucho.
sr. DÍAZ-HERRANZ (que no ha dejado de recibir una de cada dos bolas que salen del saco):
¡Vaya por dios! Así que eso habeis pensado. Y yo aquí deslomándome parasatisfacer al sr.
BOTÓN y vosotros pensando.
ZAPAZNAR (más sereno): Sí. Y como, además somos más que usted, pues hemos pensado que
podemos llegar a un acuerdo.

sr. DÍAZ-HERRANZ (los cuenta): … ¡Ah! Pues sí que sois más.
(piensa un rato)
Mira, vamos a hacer esto. Yo aquí ni pincho ni corto. El que manda es éste (señalando al sr.
BOTÓN) que me tiene ahogado a deudas. Así que id a hablar con él aver qué dice. Pero no
vayais todos que le liais. Decidid entre vosotros quién habla con él.
ZAPAZNAR (va corriendo a hablar con Ciudadano): Ciudadano, que he conseguido que nos
escuchen. Ahora podemos negociar directamente con el sr. BOTÓN. Pero es mejor que vaya
yo solo que ya tengo experiencia. Cuento con tu apoyo ¿no?
CIUDADANO: El caso es que, desde que has ido a hablar con el sr.DÍAZ-HERRANZ, yo estoy
trabajando el doble.
ZAPAZNAR: Ya, pero ten en cuenta que esto no lo hago por mí. Lo hago por LA NACIÓN (dice
esto mirando hacia arriba con cara de éxtasis. Ciudadano le imita). Además, que voy a
conseguir que tú tengas alguna de estas cosas que sacas del saco.
CIUDADANO (primero se le ilumina la cara pero después sigue trabajando): Bueno, a mí no me
líes que tengo muchotrabajo.
ZAPAZNAR saca pecho y se va, decidido, a hablar con el sr. BOTÓN.
ZAPAZNAR: Ejem … buenos días, sr. BOTÓN.
Sr. BOTÓN (no le hace caso, sigue a lo suyo):
ZAPAZNAR: Ejem … pues que he sido elegido por Ciudadano para venir a hablar con usted.
sr. BOTÓN (le mira con condescendencia, sonriendo): ¿Quién dices que te ha elegido?
ZAPAZNAR (señalando a Ciudadano con el brazo extendido): Aquel....