Ensayo

La pregunta central del presente ensayo apunta a una cuestión de difícil discernimiento, ¿cuáles son las posibilidades de interculturalizar la universidad boliviana? En otras palabras ¿cómo se lograría que los −hoy en boga− fundamentos interculturales se enseñen, se aprendan y se vivan en un ámbito universitario modificando, así, las actuales bases académicas y laborales? La respuesta no essencilla y de acuerdo a lo que se expondrá más adelante tampoco será optimista.
En estos años la palabra interculturalidad, y lo que a ella respecta, se ha convertido en eje central de discursos, políticas e investigaciones. Más que una necesidad, lo intercultural, se está convirtiendo en una moda de fácil difusión y adopción. En este uso múltiple su esencia se ha matizado a tal punto que hemosolvidado que la interculturalidad no se trata de algo dado sino algo a lo se aspira. Para una definición clara del término se desarrollará en el siguiente apartado el significado de un proyecto intercultural y por qué es necesaria su inclusión en las bases de nuestra sociedad.
De conceptos y concepciones
            Recientemente el encubrimiento del otro que irónicamente inició con el descubrimientode América, a decir de Dussel (1992), se revirtió en la necesidad de entender las convergencias plurales del territorio latinoamericano. En este amplio panorama, Bolivia dio vistos de ser uno de los países que más en serio se tomaba este nuevo reto. Con el proclamado primer presidente indígena y la también proclamada inclusión de sectores y actores sociales antes marginados el tablero del juegoparecía haber cambiado de reglas, pero la falta de una definición clara y coherencia en la práctica continúan aletargando e inutilizando lo que alguna vez se definió como proceso de cambio.
            Es importante señalar que en este escenario no se entendió que la interculturalidad supone numerosos y complejos problemas de comunicación, éticos, metodológicos y afectivos (Cf. Torres, 2010, 36)que no pueden ser omitidos o pasados por alto. Como señala Catherine Walsh:
  […] lo intercultural no puede ser confundido con lo híbrido o la fusión, ni reducirse a las adjetivaciones para la intervención pública del tipo “educación intercultural”, “sociedad intercultural” o “democracia intercultural” que en el mejor de los casos sólo sugiere la diversidad existente. La interculturalidad debeasumirse como designio de sociedad, como proyecto político, social, epistémico y ético dirigido a la transformación estructural para una sociedad distinta que no se quede en el enunciado sino que requiere del accionar compartido de cada instancia social, política, educativa y humana (Walsh, 2009:48)
            Este amplio espectro de acción que plantea Walsh responde a la necesidad de decolonizarnuestras sociedades. Desde los aportes de la academia se está planteando como vital un cambio en la epísteme de nuestro conocimiento y en los fundamentos de nuestra lógica cotidiana a partir de un conocimiento otro a decir de los teóricos decoloniales. En este sentido Victor Vich, propone que lo intercultural debe comprenderse como “algo que tiene que ver con el mundo de las interaccionescotidianas y, sobre todo, con las formas en la que las diferencias son procesadas desde los paradigmas hegemónicos” (Vich, 2005:270).
Pese a que su continuo uso le quita la importancia a nivel de necesidad para articular las relaciones sociales entre distintos grupos sociales, su denotación es clara. Lo intercultural alude tanto a prácticas sociales como a leyes estatales y a intenciones académicas. Poreste motivo, no se puede negar que el concepto de interculturalidad nos “revela y pone en juego la diferencia no solamente cultural sino colonial, a la vez que busca maneras de negociar e interrelacionar la particularidad con el universalismo pluralista y alternativo” (Walsh en Salgado, 2002:27). 
En este sentido, existe en Bolivia la demarcación de los problemas usuales y de hecho comunes en...