Ensayo
En mi camino personal a lectura no puedo dejar de mencionar a mi familia, ellos fueron mis motivadores principales para comenzar a adentrarme a lo que luego seconvertiría en mi actividad favorita. Recuerdo a mi papá leyéndome cuentos antes de ir a dormir, a mi mamá repasando sus revistas de moda y a mis hermanas disfrutando de largas jornadas atrás de un librocon alguna tapa colorida que me invitaba a devorarlos. Leer se asemeja a un legado, algo que heredé y que aún comparto con ellos. A menudo nos pasamos libros con mis hermanas, los comentamos y hastahemos llegado a llamarnos por teléfono luego de terminar una historia que nos llenó de emoción.
Desde a los relatos en Hogwarts hasta las tierras de Mordor, viajes a Latinoamérica de la mano deGaleano y un poco de Europa con Cortázar, sin olvidar a autores como George Orwell, Oscar Wilde y Edgar A. Poe, todas sus páginas, y otros tantas historias más, lograban abstraerme por un rato de todo,sembraban reflexiones, me producían distintas emociones y hasta funcionaban como somníferos naturales.
Confieso que no tengo un género preferido, soy de elegir libros por recomendación y si me gustóalgún autor. Disfruto de leer revistas, artículos que me comparten y el diario en internet. Los fines de semana la lectura se convierte en ritual en mi casa, porque a la mañana nos llega el diario a lapuerta. Ni bien nos levantamos, entre mates y tostadas, los dos disfrutamos de leernos en voz alta las noticias que llamaron nuestro interés, algún tema que justo habíamos mencionado en esos días osimplemente algo fuera de lo común que nos invita a releerlo. Es un momento que disfrutamos mucho compartir.
En lo que refiere a la escritura tengo una cuenta pendiente, debería hacerlo más seguido.Más allá de algunas líneas en una red social, una carta a un ser querido, o ciento cuarenta caracteres en un mico blog, no escribo. A veces pienso que sería una buena forma de descarga, como una...
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