ensayo

“La sangre llama”
15 de septiembre de 2011:
8:00 p.m. Es la hora en que todo el pueblo baja al zócalo a dar el grito. Desde una hora antes se escucha por las calles el sonido de lasmatracas,silbatos, gritos de alegoría o de desesperación, bajando por un pequeño cerro que ahora es calle pavimentada, las familias desde las más humildes hasta las que viven cómodamente con lujos bajaronafestejar.
Yendo hacia el zócalo las calles estaban sin un adorno, no había nada colgado de casa en casa, en las paredes, focos alusivos a las fiestas, lo único que adornaba las calles eran los envasesdecaguamas.
Plantados ya en donde iba a ser la fiesta, lo primero que se vio a lo lejos fueron los policías que sin hacer nada eran el único adorno aparte de los listones tricolores en elH.Ayuntamiento. El zócalo estaba lleno de gente, viendo o formándose en los puestos de pozole, garnachas, dulces típicos o cualquier alimento para llenarse.
En frente del Palacio había unas tarimas y encimadeestos un grupo de gente tocando música jarocha, huapangos, marchas, nadie prestaba atención, obviamente se veía reflejada la ignorancia de la gente, solo las personas adultas prestaban atención alamúsica. Los niños por su pate aventaban espuma por todas partes, aventándolas a las personas que caminaran cerca del kiosco.
Tomando un par de fotografías de cómo se vive y como se celebra me dicuentaque solo bajan a no por el significado de lo que realmente son las fiestas patrias o como hay que tener que festejarlas. Donde quedo aquella tradición de año con año hacer una noche mexicana,vestidosde charro o de Adelitas, llevando tacos dorados, pozole, tostadas.
Ahora lo que más le interesa a la gente es el relajo que se pueda hacer, demostrando quien es el que manda tomándose vasos y vasosdemichelada.“La sangre llama”
15 de septiembre de 2011:
8:00 p.m. Es la hora en que todo el pueblo baja al zócalo a dar el grito. Desde una hora antes se escucha por las calles el sonido de las...