Ese Cabeza Palote

No pretendemos ser lo que no somos, no podemos presumir de ser españoles como tantos canarios ignorantados y sumisos al poder del estado español. No renunciamos, ni renunciaremos a nuestro derechoinalienable de ser libres y llevar las riendas de nuestro destino. Aquí en Canarias padecemos la mayor enfermedad que un estado dominante imperialista le puede infringir a otro: el sometimiento, yconsecuente colonialismo. Creando a su vez este hecho, la inexistencia política de un verdadero sistema democrático donde el pueblo tenga siempre el protagonismo, que no quede solo en meter una papeletacada cuatro años, como si fuera un rebaño de ovejas, para satisfacción de la manada de lobos. El pueblo debe formarse y participar de la política activa en múltiples referéndums, donde un gobierno notenga siempre la última palabra, y aún menos en el poder legislativo. El estado español que nos controla y oprime, inoculó esta enfermedad durante más de 300 años, también por todo centro y Sudamérica.Los síntomas eran claros: el envío del maestro, para ignorantar con sus historias, el recaudador, para expoliar, el cura para mantener la divinidad del trono absolutista, y el soldado, para perpetuarel sistema. Gobernadores y altos cargos llegados de España mantenían la prioridad administrativa a favor de la metrópoli, hasta los criollos con descendencia española, solo podían acceder a cargos detercera categoría. España conoce muy bien a los colonos nacidos tras varias generaciones. Estos empiezan a dudar de la madrastra patria lejana, queriendo ser patria libre en su lugar de nacimiento ydesarrollo. Canarias sigue padeciendo esas mismas enfermedades. En Latinoamérica la cura a esos males tuvieron nombres gloriosos: Bolívar, Sucre, San Martín, Artiga, José Martí, tantos otros… peroaquí seguimos trabajando para que los ciudadanos canarios, se unan a la justa causa de la libertad. Por desgracia, igual que pasó en América, están tan ignorantados y acostumbrados a la sumisión, que...