Estado en cuesti n
La “
familia y escuela son los dos contextos más influyentes en el desarrollo (...),
por ello es fundamental llevar a cabo una relación basada en la confianza,
cordialidad y complementariedad
” (Mir, et al., 2012). Partiendo de esta premisa y
del análisis de las lecturas, se han determinado ciertos puntos de encuentro en cuanto al estudio que se ha abordado sobre el tema, en donde se destaca como
problemática la falta de comunicación entre estos dos sistemas por diferentes
aspectos como los nuevos modelos familiares y el desinterés de los padres en
apoderarse de estos procesos. Es así como los documentos analizados proponen algunas estrategias de acción que posibilitan la creación de espacios compartidos,
para mejorar su relación y la participación activa de los padres en los procesos
académicos y convivenciales de los estudiantes.
Uno de los puntos planteados como problema es la formación de los nuevos
modelos familiares que se han ido construyendo, en donde sus integrantes no
tienen un rol bien definido, lo cual hace que se abandone al estudiante frente a los
procesos escolares. Por ejemplo Rivillas (2014) resalta que dentro de la población
de estudio “
algunos niños y niñas además de vivir con sus padres comparten el
hogar con otros familiares, (...), (
a quienes
) se les delega la responsabilidad del
cuidado y orientación de los niños
” (Rivillas D., 2014, pág. 164), argumentando
que esta es una de las causas por las cuales los padres no se involucran con la
escuela para aportar en el desarrollo educativo de sus hijos contribuyendo al
fracaso académico y convivencial de los estudiantes. Por otra parte Moreno
(2010) expresa que en la actualidad la escuela está acumulando funciones de
enseñar y educar, en donde asume funciones que hacían parte de la familia como
es la de educar en valores, hábitos y algunos aspectos de la formación en la
socialización primaria.
Lo anterior es observado desde la práctica cotidiana de la escuela, en donde se
evidencia que en general los estudiantes obtienen mejor desempeño académico
cuando existe una comunicación entre las familiasescuela basada en la
comprensión de las actitudes hacia el aprendizaje, interacciones sociales y
expectativas mutuas, así como en el establecimiento en conjunto de metas
académicas y hábitos de aprendizaje. Para mejorar la comunicación Moreno
(2010) identifica varios factores que pueden incidir, como la motivación por parte
de los profesores y la comunicación en doble vía, en donde la escuela debe
realizar mayores esfuerzos en brindar oportunidades reales de comunicación. Por
otra parte este mismo autor recomienda para mejorar la relación entre familia y
escuela, además de la comunicación, es necesario fortalecer los mecanismos de
participación de todos los involucrados en el proceso enseñanza aprendizaje y reconstruir la competencia familiar desde el reconocimiento respetuoso de las
particularidades y condiciones, propiciando “
encuentros significativos entre las
familias, la escuela y los estudiantes
” (Rivillas D., 2014, pág. 165)
No obstante, en el ambiente escolar se suscitan episodios de violencia las cuales
obedecen a las experiencias personales de los niños y niñas, por ende la
investigación en el ámbito educativo también encara la responsabilidad de
ahondar su trabajo en estos temas de convivencia “Como es de anotar, los
estudios en Colombia solo han abordado el problema en las instituciones
educativas en lo relacionado con la violencia y/o agresiones en sus diferentes ...
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