Eugenio Sue Umberto Eco

EUGENIO SUE: EL SOCIALISMO Y EL CONSUELO

Je suis socialiste
Su publicación por entregas “Los Misterios de París” comienza en 1842. Novela popular.
Obtiene éxito entre los lectores. Sue alcanza la cima soñada por cualquier novelista. A partir de ese momento la propia novela se escribe sola con la colaboración del público
Engels y Marx escribieron la sagrada familia usando “los misterios deparís” como objeto polémico y como hilo conductor o sea, no sólo como documento histórico sino también como obra capaz de suministrarles personajes “típicos”. En la sagrada familia los autores se ríen o se burlas de las criticas en “clave hegeliana” que realiza un tal Szeliga (critico literario)
Sue se veía obligado a realizar una adaptación teatral de la obra deleitando al público parisino consiete horas consecutivas de angustias espectaculares. Y era normal dice Eco porque Sue no escribió una obra de arte, si sólo hubiera escrito una obra de arte, la historia se habría percatado de ello, pero no sus contemporáneos y menos de una forma tan unánime y rápida. Sue inventó sin embargo un mundo y lo pobló de personajes sanguíneos, vitales y emblemáticos a un tiempo, falsos y ejemplares,toda una selva de máscaras inolvidables.
En la obra descubrimos la presencia de arquetipos.
El mecanismo de lo patético que tiene Sue, debe encontrarnos parcialmente predispuestos
Tenemos q conocer la novela para comprender el libro en lo que vale hoy en día y por la utilidad que pueda tener: por una parte, como documento de capital importancia que nos ilustra en lo tocante a ciertos elementosde la sensibilidad social decimónica y sus raíces, y por otra, como clave que nos ayuda a entender las estructuras de la narrativa de masas.

Del dandismo al socialismo
Como llega Eugenio Sue a “los misterios de París”?
Sigue los rasgos de la historia con una vocación popular, o mejor aun, populista.
Del legitimismo en el terreno de la política, del dandismo en la vida privada y publica odel satanismo en estética, a la profesión de Fe socialista e incluso la muerte en el exilio. Tal es la historia intelectual de Sue.
Su forma de escribir es bastante elemental, aunque los argumentos exóticos le permitan realizar alguna que otra osadía en el terreno de la nomenclatura.
Lo que está haciendo es preparar el material para fabricar las máscaras de la comedia ciudadana y política queescribirá con “los misterios de París”, con “El judío errante” o con “les mustères du peuple”.
Su conversión al socialismo se realiza rápidamente a través de la visita que realiza a un obrero modelo de esos que han leído buenos libros sobre cuestiones sociales, a un socialista consciente, un auténtico tribuno un protagonistas de las futuras barricadas del 48. Todo esto lo hace invitado por Pyat–critico dramático-
Existe una relación bastante estrecha entre dandismo y el socialismo. Sue había descubierto una nueva forma de distinguirse de sus iguales; ahora ya no pretende deslumbrar a París con sus trajes y sus caballos, sino que lo asombrará predicando la Religión del Pueblo. Y en su ambiente semejante actitud resultará tan provocativa como excéntrica.
Entonces aparece una vez más enescena el satanista, atraído por lo siniestro, lo morboso, por el sabor pútrido de la lengua y sin duda el romántico el que reinventa un arquetipo milenario, a saber el de la “vierge souillée” (muchacha violada de cuerpo, pero inmaculada en su espíritu), reconciliando así los derechos de lo novelesco con los que utiliza la moralidad y obteniendo de paso un conjunto patético de arquetipos.
Aun nosabe que los lectores van a reconocerse en sus personajes y van a leer su obra en una clave distinta. Cuando se percate de ello, tendrá que cambiar de clave.
Cuando un autor realiza totalmente en frió una operación comercial se las ingenia para elaborar un mensaje susceptible de ser interpretado a la luz de una serie de códigos diversos; Sue en cambio, sólo admitirá un código: el de las masas...