Eva duarte y victoria ocampo.dos maneras de engendre a la argentina.

EVA DUARTE Y VICTORIA OCAMPO
DOS MANERAS DE ENTENDER A LA ARGENTINA[1]

Dos mujeres paradigmáticas de la historia argentina: una, María Eva Duarte de Perón (1919 –1952), de cuna humilde –y humillada-; la otra, Victoria Ocampo y Aguirre que nació y murió en Buenos Aires (1890-1979), heredera de familias patricias encumbradas. ¿Cuál de ellas fue más importante? Es una pregunta ociosa.Las dos impusieron su personalidad original, hicieron todo lo contrario de lo que la sociedad de su tiempo esperaba de ellas como representativas de círculos sociales opuestos. Fueron el tipo de mujeres que rompieron con los convencionalismos de una sociedad pacata y llena de convenciones prejuiciosas, características de su época, respecto del papel de mujeres y hombres. La primera,levantándose por encima de un pasado que la condenaba a ser invisible, que le imponía la cabeza baja por ser hija bastarda, apenas escolarizada. La segunda, de prosapia patricia, educada por institutrices francesas e inglesas, tenía ante sí el mundo. Sin embargo, cada una prisionera de su origen y sus convenciones, pero dispuestas a trascender las murallas que las contenían y a correr los riesgos que se lespresentaran.
Blas Matamoro, autor de Genio y figura de Victoria Ocampo, definió breve pero contundentemente la diferencia entre estas dos mujeres: “Victoria es el mito de la niña bien que da un portazo y sale a la calle, abandonando el palacio. Evita es el mito simétrico: la callejera que empuja el portón del palacio y se mete en el jardín”. La primera tuvo tiempo, ochenta y ocho años, pararomper uno a uno los límites fijados a las mujeres de su condición social; la segunda, murió joven, condición indispensable para trascender como mito, en menos de diez años trepó de la nada a la más alta esfera de la Argentina –mucho más allá del jardín del palacio-; fue vencida por un cáncer fulminante mientras que VIctoria batallo con él los últimos 16 años de su vida. Como personaje, Eva,trascendió las fronteras nacionales con la ópera rock (Evita, 1978) y particularmente con la canción “No llores por mi Argentina”, a la que le siguió en 1996, la película de Madona en el papel de Evita. Esta última causó gran revuelo en Argentina, de hecho no se pudo filmar ahí por las discusiones y fuertes oposiciones contra un argumento que no correspondía a las expectativas ni de admiradores nide opositores.
Victoria, en cambio, no es una figura tan popular pero si igualmente polémica. Seguramente unos no le perdonan su cuna privilegiada y educación extranjerizante y los de su clase, que no se haya apegado a las reglas, convenciones y gustos de la misma. No es que ella no gustase de los refinamientos y oportunidades que le proporcionaba su situación económica, sino que saltabalas normas para llevar a cabo proyectos que no concordaban con el esprit de corps de la alta sociedad porteña, como por ejemplo irrumpir, en 1929, con una construcción modernista el exclusivo sector de Palermo Chico.
Aunque la casa fue construida por el arquitecto Alejandro Bustillo, es posible reconocer la influencia en Victoria del planteamiento teórico racionalista de Le Corbusier paraenmarcar ambientes luminosos que dan la sensación de libertad, donde resaltan las líneas depuradas, sin adornos, contrastando con los lujosos petit hotel que elevan sus perfiles afrancesados entre una fronda de jacarandaes, tipas, palos borrachos y ceibos, que el arquitecto paisajista Carlos Thays diseño como Barrio Parque en 1912. La construcción sufrió el rechazo del exclusivo vecindario perono era algo que a Victoria le quitara el sueño y, a pesar de que 12 años después la vendiera, ha sido rescatada y refuncionalizada como Casa de Cultura, dependiendo del Fondo Nacional de Las Artes por lo que actualmente es posible visitarla y observar la escalera donde en 1931 se tomaron la foto los integrantes del equipo fundador de SUR.
En cambio, ya no se puede visitar el Palacio...